Trujillo reivindica al marqués de Torre Tagle, su libertador
Dos siglos después, don Bernardo Tagle y Portocarrero, más conocido en la historia como el marqués de Torre Tagle, va encontrando una ubicación mejor en la historia peruana de la independencia, luego que se le pusiera en un segundo orden entre José de San Martín y Simón Bolívar.
El bicentenario de la independencia de Trujillo, que Torre Tagle alentó y declaró desde su cargo de intendente realista, el 29 de diciembre de 1820, ha servido para que hasta sus huesos vuelvan a flote con el traslado de sus restos a la catedral de Trujillo.
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Torre Tagle y su esposa Mariana Echevarria compartían un doble nicho, desde 1853, en el antiguo Cementerio General de Lima, hoy Presbítero Maestro, de donde fueron exhumados y recibieron un homenaje del presidente Francisco Sagasti en la sede de la cancillería, el Palacio Torre Tagle.
Desde allí sus restos fueron llevados hasta Trujillo, ciudad que ayer conmemoró a lo grande el bicentenario de su independencia, y lo elevó a la categoría de libertador. Torre Tagle, sin embargo, solo permaneció en Trujillo poco más de un año.
Limeño de pura cepa, con un tronco familiar que se remontaba a fines del siglo XVII, desde su cargo en Trujillo, el IV marqués de Torre Tagle fue el aliado perfecto que necesitaba San Martín cuando asediaba a Lima desde Huaura, por el norte, y desde Chincha y Cañete por el sur.
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Ese paso fundamental de Torre Tagle, que lo convirtió en uno de los próceres de la independencia, será revivida en un cortometraje que inició en junio el Proyecto Especial Bicentenario con 50 actores, titulado “Trujillo y el marqués libertador”.
Las escenas se han hecho en casonas y lugares emblemáticos que aún quedan del Trujillo del siglo XIX. En el elenco hay actores limeños, trujillanos y el corto será de 15 minutos, centrándose solo en el papel de Torre Tagle y la declaración de la independencia trujillana.
Sin embargo, la trayectoria de Torre Tagle, en los años cruciales de la independencia, entre 1820 y 1826, merecen un documental más extenso y profundo, para aclarar los aspectos sombríos que llevaron al marqués a morir junto con su esposa en el Real Felipe, sitiados por tropas patriotas.