OPINIÓN | Dennis Falvy: "La deuda espantosa que nos agobia"
Lo que señalaba en inglés Jefferson es: “Si los pueblos permiten un día que los bancos privados controlen su moneda, los bancos y las instituciones que florecerán en torno a ellos, privarán a la gente de toda posesión, primero por medio de la inflación, enseguida por la recesión, hasta el día que sus hijos se despertarán sin casa y sin techo, sobre la tierra que sus padres conquistaron”.
El analista Egon Von Greyerz señala que desde que se creó la Reserva Federal en 1913, los banqueros centrales y comerciales han estado dirigiendo con éxito el sistema financiero para su propio beneficio. En agosto de 1971, Nixon instaló las monedas fiduciarias.
Y, mientras el dólar siga siendo la moneda de reserva del mundo, la Fed también controla partes importantes del sistema financiero global.
Hay una deuda astronómica que jamás existió, que conlleva activos de la burbuja financiados por dinero impreso creado de la nada y parece que la historia no existiera.
“Plus ça change, plus c'est la même chose”. Es decir “Cuanto más cambia, más se mantiene igual “.
Y es que jamás ha habido burbujas de deuda al nivel actual en casi todo el mundo.
Basta mirar la magnitud de la deuda global que se ha creado desde 1971, en donde se llegó a U$ 1.5 billones y 29 años después, había crecido 66 veces a U$ 100 billones y desde entonces ha aumentado otras 3 veces a U$ 300 trillones.
La deuda global entonces ha aumentado 200 veces desde que Nixon le quitó el respaldo de oro al dólar.
La etapa final de esta era monetaria comenzó en 2006 con la crisis sub prime.
En septiembre del 2019 el sistema financiero se vio sometido a una fuerte presión y los bancos centrales entraron en pánico en un intento de salvar el sistema bancario en bancarrota con una liquidez masiva y la excusa fue la pandemia.
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