08/10/2020 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 09/01/2023
El papa Francisco y sus más estrechos colaboradores sorprendieron ayer al presentarse en la audiencia general en el Aula Pablo VI, y luego tampoco guardaron la distancia debida ante los cientos de fieles de asistentes en el patio de San Dámaso, pese a las restricciones reimpuestas en toda Italia por el rebrote de la pandemia.
Al igual que en otras ocasiones, Francisco no evitó el contacto con los fieles acercándose a hablar con ellos sin mantener distancia de seguridad e incluso besó las manos de un sacerdote, capellán en una cárcel.
Tampoco llevaban mascarillas el asistente del papa, quien le echa gel desinfectante tras los saludos a los fieles, ni el personal de seguridad ni los fotógrafos del Vaticano.
También te puede interesar: OMS: Es inaceptable sacrificar a gente mayor para lograr inmunidad contra la Covid-19
Esta actitud de Francisco y su entorno sorprendió porque en Italia se registra un alza en los contagios del coronavirus, con 3,700 ayer, lo que obligó al primer ministro italiano, Giuseppe Conte, a reimponer el uso obligatorio de mascarillas en general.
El rebrote del Covid-19, con un promedio de 2,600 por día desde la semana pasada, es el más grave desde el peor momento de la pandemia en abril pasado