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OPINIÓN | Miguel Humberto Aguirre: "Para un monumento"

"Hay maestros merecedores de un monumento por todos los esfuerzos que deben hacer para llegar hasta sus alumnos".
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09-07-2021

Se recordó, por lo menos lo escuchamos en los medios, el Día del Profesor o del Maestro. Los homenajes de oyentes alumnos recordaron a quien, en tiempos pasados, les enseñaron sus primeras letras.

El afecto. La nostalgia. Los recuerdos, las evocaciones afloraron con mucho agradecimiento, por esa herencia eterna entregada, por mujeres u hombres, siempre presentes en nuestros recuerdos.

¿Olvidaremos a quien nos enseñó y nos obligó a estudiar las tablas de multiplicar? A leer. A tener los cuidados, por reglas, de las diferencias entre palabra escrita con “s” o con “z”, o “uve” o “b”: jamás.

Hay maestros merecedores de un monumento por todos los esfuerzos que deben hacer para llegar hasta sus alumnos. Por estos días, con la famosa pandemia, no solo se han multiplicado sino quintuplicado o sexto publicados para enseñar.

Por ejemplo, muy difícil será olvidar el relato escuchado al profesor Carlos Ventura de Lambayeque. Su moto taxi, con la cual también trabaja para poder tener un mayor ingreso, la ha transformado en un “salón de clases” ante las limitaciones de sus alumnos carentes de todas las facilidades necesarias para los chicos y puedan aprender algo. Primero fue hasta el barrio donde vivían sus alumnos. Los problemas aumentaron. Solo había chicos esperanzados en aprender algo. Más, las facilidades para hacer las clases: nada. Alguien vio los esfuerzos realizados por esta pareja de maestros y les regaló una pizarra.

Esta pizarra hoy se coloca en la parte frontal del vehículo, con las facilidades, para los niños, sentados en sus bancas traídas de sus casas y puedan oír las materias.

¿Esos trabajadores de la educación no merecen un monumento? El profesor Ventura contó a Nicolás Lúcar necesitar muchas cosas para dar mayores comodidades a esa legión de chicos soñando hoy, para saber más que ayer. Un monumento para poder ver a niños con esperanzas, y sonriendo.

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