OPINIÓN | Manuel Altamirano: "Vulnerando a la Ley y a la PNP"
En nuestro país existe hoy en día una tendencia maliciosa que busca generar odio hacia la Policía Nacional del Perú, ocasionada, sobre todo, por la injusta ola de críticas y medias verdades que se vienen propalando en algunos medios de información, que sin pruebas ni pericias, culpan de la muerte de dos manifestantes a los miembros de la PNP, sin una investigación previa que determine de manera fehaciente quiénes cegaron la vida de estos dos jóvenes, los mismos que contaban con antecedentes policiales.
No he visto ninguna imagen de los policías heridos, menos de los destrozos en el centro de Lima, es más, no han dedicado siquiera un espacio a las marchas a favor de la institución, ¿no es acaso una forma de mentir lo que algunos medios pretenden al manipular la información?
Se culpó a la Policía Nacional de la desaparición de varios jóvenes, hoy sabemos que estos angelitos no estuvieron detenidos, tampoco secuestrados, mucho menos desaparecidos, algunos incluso han negado el entuerto, además algunos de estos “desaparecidos” tenían antecedentes policiales.
Pero ¿Quién financió los paneles luminosos de los falsos desaparecidos? ¿Quiénes originaron las falsas denuncias? ¿Cuál es la verdadera razón de la participación en las marchas de las barras bravas? ¿Qué oscuros intereses se esconden detrás de la demolición sistemática y mediática de nuestra Policía Nacional del Perú? A este maltrato y escarnio público se suma las argucias legales, la tinterillada que busca descabezar de manera ilegal a la institución, sobre todo en estos momentos en que necesitamos urgentemente fortalecer nuestras instituciones.
Los tenientes generales, excomandantes generales de la Policía, han hecho un comunicado instando a que algunas instituciones se pronuncien y den su opinión jurídica, puesto que se ha vulnerado la ley y el reglamento al nombrar como nuevo comandante general de la Policía Nacional del Perú a un general que estaba en el puesto 18 y que no era teniente general, esperemos que en estos momentos esas entidades sean solidarias con la PNP, una institución que ha perdido a muchos de sus miembros en la lucha contra la delincuencia, contra el terrorismo, contra el Covid-19 y hasta por el abandono del Estado, y que a pesar de todo ponen en riesgo su vida en el quehacer diario.
Saludo a los jóvenes que protestan porque están hastiados de esta clase política sin renovación, contra los políticos que mienten sin desparpajo, los manifestantes que marcharon pacíficamente merecen un aplauso, pero condeno a los violentistas e infiltrados que no respetan a nadie. Espero no encontrarme en la dimensión desconocida donde la Policía es la mala y los delincuentes los buenos, en un mundo al revés.