OPINIÓN | Luis Ángeles Laynes: "De espaldas a la población"
En estos días advertimos que el mensaje de la ciudadanía expresada en las elecciones del domingo 11 de abril, fue de rechazo de un pueblo contra quienes durante décadas gobernaron el país y le dieron la espalda a los más necesitados, a los que no tienen qué comer, a los que sufren la crisis económica, a los millones que han perdido su empleo y por tanto hoy no tienen cómo pagar sus deudas, a la gente que se muere por el colapso de los hospitales, falta de oxígeno y camas UCI, entre otras carencias. Pero ese rechazo no solo se observó en los votos, sino en ese ausentismo de más de ocho millones de peruanos que no acudió a votar porque ya no cree en esa clase política. Sin embargo, ese mensaje no lo ha advertido el gobierno de transición y emergencia que presiden Francisco Sagasti, o tal vez sí, pero no le importa, porque ayer le dio un portazo en la cara al pueblo, al presentar una demanda de inconstitucionalidad de la ley contra la usura, en claro favor a los bancos abusivos, y anunciar también que observará las leyes que permiten la devolución de fondos de las AFP y de la CTS, como lo hicieron el día anterior con la ley Fonavi, pese a que el ministro de Economía, Waldo Mendoza, reconoce que esa plata es de la gente.
No entendemos por qué tanta insensibilidad con un pueblo que se muere de hambre y por la pandemia del coronavirus, pésimamente manejada por este gobierno y el que le antecedió el vacado Martín Vizcarra, que prefirió vacunarse a escondidas mientras más de 130 mil peruanos morían a manos del covid-19.
La gente solo quiere que le devuelvan parte de su plata para poder alimentarse y defenderse del salvaje virus, lo necesitan hoy porque no saben qué pasará mañana. El propio ministro de Economía reconoció en la conferencia de prensa de ayer que ese dinero les pertenece, pero ni eso les conmueve. Les da la espalda y no les permite que retiren sus fondos de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) y de su Compensación por tiempo de Servicios (CTS).
La ley contra la usura bancaria está vigente desde que fue publicada en el diario oficial El Peruano. Hoy vence el plazo para que el Banco Central de Reserva fije los topes a los intereses bancarios, que hoy son un abuso y tiene ahorcados a millones de peruanos que no pueden pagar sus deudas no porque no quieran, sino simplemente porque no tienen dinero para cumplir sus compromisos crediticios.
Los constitucionalistas dicen que al estar vigente la ley hasta que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre la demanda presentada por el gobierno, el BCR debe cumplir con fijar los topes a los intereses. Esperemos que cumpla, aunque lo más probable es que, tal como el gobierno hizo con la ley de devolución de aportes a la ONP, el presidente del ente emisor, Julio Velarde, no hará caso a la norma y dejará que los bancos sigan abusando de los peruanos.
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