OPINIÓN | Eduardo González Viaña: "Pintores peruanos en un molino de viento"
Catorce pintores peruanos comienzan este sábado a exhibir sus acuarelas en un lugar que podría ser también el corazón del mundo.
Con el apoyo del Ayuntamiento de Los Yébenes, en Toledo, y de la embajada del Perú en España, José Miguel Collantes ha convertido en una sala de exposiciones pictóricas el interior de un molino de viento, de aquellos a quienes se enfrentó Don Quijote al comienzo de sus valerosas aventuras.
Los Yébenes se alza en las alturas de un monte situado frente a Toledo (que también está en las alturas) y cuyos habitantes, entre la niebla y el frío de estos días, y como si no les importara saber si están vivos o muertos, caminan detrás del eterno caballero de la Mancha.
Viendo desde lejos este pueblo y el tributo que rinden al Quijote, uno cualquiera se pregunta si de veras Cervantes lo dibujó como loco, o si solo lo consideraban así los prisioneros de la vulgar realidad, aquellos “cuyos pensamientos jamás habían sobrepasado la altura de sus sombreros”.
“¿Qué gigantes? -dijo Sancho Panza. Mire vuestra merced, que aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino molinos de viento, y lo que en ellos parecen brazos son las aspas, que, volteadas del viento, hacen andar la piedra del molino.
-Bien parece -respondió don Quijote- que no estás cursado en esto de las aventuras: ellos son gigantes; y si tienes miedo, quítate de ahí, y ponte en oración en el espacio que yo voy a entrar con ellos en fiera y desigual batalla.
Y, diciendo esto, dio de espuelas a su caballo Rocinante...”
Los molinos de viento (o los gigantes que suponía) lo zarandearon y lo dejaron medio muerto, pero no se dio por vencido porque todo lo que le interesaba era actuar como un caballero andante y morir por una noble y peligrosa tarea.
«Has de saber, Sancho amigo, que yo nací por querer del cielo en esta nuestra edad de hierro para resucitar en ella la dorada o de oro. Yo soy aquel para quien están guardados los peligros, las hazañas grandes, los valerosos hechos».
Don Quijote es un héroe castellano. Comprende y practica la doctrina del sacrificio y la lucha por pobres y desvalidos. Inmortal, caminará este fin de semana por los molinos en busca de las acuarelas peruanas y escuchará la mágica lengua que nos junta y nos hace eternos.
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