11/01/2021 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 09/01/2023
Atención. Este lunes, la Policía Nacional del Perú (PNP) intervino un bar clandestino que era utilizado frecuentemente por un amplio número de extranjeros para realizar mega eventos en plena pandemia por el covid-19 en el distrito de San Martín de Porres.
La Policía Nacional intervino, esta madrugada, a más de 150 personas en una discoteca clandestina ubicada en el distrito de San Martín de Porres, donde se desarrollaba una fiesta pese a la inmovilización obligatoria dispuesta por el Gobierno para evitar el contagio de la covid-19.
Según el informe de Exitosa Perú, pese a la norma de inmovilización ciudadana o toque de queda y además la prohibición de las reuniones y eventos sociales, estas personas asistían frecuentemente a este establecimiento para pasar momentos de diversión sin importarles un posible contagio masivo de covid-19.
El último evento donde se realizó la intervención había sido convocado para este domingo a las 7 de la noche y se extendió por toda la madrugada, cuando los agentes de la PNP allanaron el lugar a las 4 de la madrugada.
La Policía tuvo que realizar disparos al aire para que los asistentes no se escapen, puesto que al momento de la intervención los asistentes empezaron a huir de la zona.
De esta manera, el subgerente de Seguridad Ciudadana de la municipalidad de San Martín de Porres, Luis Saldívar, precisó que la acción policial, que contó con el apoyo del Serenazgo del distrito, permitió la intervención de estas personas que no llevaban mascarillas ni respetaban el distanciamiento en este local ubicado en el cruce de las avenidas Canta Callao y Dominicos.
Indicó que la mayoría de intervenidos son extranjeros y fueron trasladados en varias camionetas hasta la comisaría de Sol de Oro para la imposición de las papeletas.
Asimismo, ya se han iniciado las investigaciones contra el propietario del local donde se realizaba esta fiesta clandestina, ya que no solo habría violado la norma de inmovilización obligatoria, sino que abrió pese a tener una orden de clausura.
Por su parte, la Policía verificó que en el interior del local intervenido se había habilitado espacios con colchones, por lo que se sospecha que también funcionaba como prostíbulo.
DATO
Los vecinos de la zona denunciaron que este tipo de fiestas clandestinas se realizan todos los fines de semana y que las calles se llenan de autos y personas que ingieren bebidas alcohólicas en plena vía pública.
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