Siete datos sobre la gamificación, una nueva metodología de enseñanza
La gamificación es una metodología que busca aumentar la motivación y mejora del aprendizaje de los estudiantes en un entorno lúdico que alcanza mejores resultados en la enseñanza. Este recurso pedagógico implica utilizar juegos digitales y analógicos, con la finalidad de despertar la curiosidad y el deseo de aprender de los estudiantes.
“Usa elementos variados para reforzar el aprendizaje en clase: desafíos, recompensas, storytelling, e insignias por logros o trofeos. Además, ayuda a desarrollar habilidades como motivación, creatividad, solución de problemas, cooperación, sociabilidad, comunicación y negociación”, explicó Marcelo Ortiz, especialista de Corefo.
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En ese sentido, el también profesor de Matemática detalló siete claves para aplicar esta metodología en el aula:
Define un objetivo claro. Establece qué conocimientos o actitudes quieres que tus estudiantes adquieran o practiquen mediante el juego.
Transforma el aprendizaje. Debes plasmar el proceso de aprendizaje tradicional en una propuesta lúdica y divertida.
Propón un reto específico. Los estudiantes deben estar al tanto de cuál es el objetivo del juego y qué tienen que hacer para lograrlo.
Establece normas del juego. Las reglas sirven para reforzar el objetivo de la dinámica, pero también evitan que el caos se apodere del desarrollo de la misma.
Crea un sistema de recompensas. Los sistemas de puntuación o premios sirven para darle valor a la adquisición de distintas habilidades.
Crea una competición motivante. Puedes optar por juegos cooperativos donde los participantes tendrán que colaborar para obtener la recompensa.
Establece niveles de dificultad. El funcionamiento de un juego se basa en el equilibrio entre la dificultad de un reto y la satisfacción que se obtiene al superarlo.
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