En Familia: La relación entre los ejercicios y el sistema inmune

Fortalecer el sistema inmunológico se convirtió en una prioridad en medio de la pandemia de la COVID-19. En tal sentido, un estudio del Colegio Americano de Medicina Deportiva reveló que las personas que se ejercitan regularmente presentaban una mejor respuesta inmune, así como la disminución de una inflamación crónica.

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“La actividad y el ejercicio físicos garantiza el mejoramiento de nuestro sistema inmune, por ello debe practicarse, de preferencia, tres veces a la semana, si se trata de ejercicios leves a moderados”, explicó Karen Quiroz, directora de la Escuela de Nutrición y Técnicas Alimentarias de la Universidad Le Cordon Bleu.

Mejora la función de las células inmunitarias: Los ejercicios aeróbicos involucran el movimiento de millones de células inmunes, principalmente las encargadas del reconocimiento y eliminación de células infectadas por algún virus, haciéndonos más resistentes a las infecciones.

Reduce el estrés y aumenta la producción de células T: Cuando las personas se estresan, la capacidad de multiplicarse de sus celular T -en respuesta a agentes infecciosos- se reduce. El ejercicio ayuda a contrarrestar estos efectos.

Disminuye el impacto de enfermedades virales: Hace que las células inmunes mantengan la capacidad de redistribuirse para que puedan “patrullar” nuestro cuerpo e impedir que los virus y otros patógenos encuentren un punto para atacar.

Mejora la respuesta inmune a la vacunación: El Colegio Americano de Medicina Deportiva ha destacado que las personas que se ejercitan con regularidad (entre ejercicios leves a moderados) mejoran la respuesta inmune de la vacuna y disminuyen la inflamación crónica de bajo grado.

Finalmente, la especialista aconseja sumar una dieta variada, equilibrada y saludable que contribuya al buen funcionamiento de las defensas.

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