En Familia | Cómo tratar un estómago suelto
Que levante la mano quien no haya tenido diarrea. Lo más probable es que nadie pueda decir que nunca lo ha sufrido; y es que este trastorno digestivo es, quizá, el más común de todos.
La diarrea es un aumento en la frecuencia de las deposiciones, siendo estas muy líquidas y en gran cantidad. La causa más frecuente suele ser: la ingesta de alimentos en mal estado, una infección, algunos medicamentos, el estrés emocional.
Aunque, por lo general no trae complicaciones, sí puede haber deshidratación. La forma de prevenirla es asegurar la ingesta de suficiente líquido. La cantidad que necesites dependerá de las pérdidas, siendo recomendable unos 2-3 litros diarios:
Agua: posibilidad de añadirle zumo de limón.
Infusiones y caldos.
Agua de arroz: Hervir un litro de agua con un puñado de arroz durante treinta minutos. Colar y dejar enfriar antes de tomar. (Conservación: 24h en nevera)
Agua de zanahoria: Preparación semejante a la de arroz. (Conservación: 24h en nevera)
Suero oral casero, mezclar: (Conservación: 24h en nevera)
Un litro de agua.
Dos cucharadas soperas de azúcar.
Media cucharilla de sal.
Media cucharilla de bicarbonato.
Una taza de zumo de limón.
Suero oral de venta en farmacias.
La leche preferible en forma de yogur natural.
Evita bebidas alcohólicas o con gas.
Las bebidas para reponer sales minerales y agua que se utilizan en la actividad física intensa no son óptimas, aunque podrían ser suficientes en personas sanas.
Una diarrea suele durar entre 3 a 4 días. Si se prolonga o surgen otros síntomas, se debe acudir al médico, ya que podría deberse a una infección que deba ser tratada con el uso de medicamentos específicos.