En Familia | Adiós a la piel grasa del rostro

Es normal que en la zona T del rostro, que comprende la frente, la nariz y el mentón, sea donde se acumulela mayor cantidad de grasa. Pero si estos niveles son elevados también en el resto de la cara, entonces se habla piel grasa, que puede ser normal o ir acompañada de dilatación de los poros y suciedad en los mismos.

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Estos casos extremos suelen traer inconvenientes, pues se sale de control debido a las hormonas, los factores ambientales y otros promotores de grasa que pueden convertirse en una auténtica pesadilla productora de acné. Con estos tips de rutina puedes mantener ese exceso de grasa al límite:

Excederse con el lavado del rostro puede resultar contraproducente

Hazlo 2 o 3 veces al día máximo, una vez por la mañana y otra antes de irte a dormir, pero si quieres, también una vez después de comer.

Utiliza agua tibia para la higiene

Usar agua caliente o muy fría desequilibra la humectación al resecar excesivamente la piel, así que, para compensar, tu piel produce más grasa.

Elige un limpiador con ácido salicílico

Esto controla la producción sebácea y detiene el crecimiento bacteriano, además favorece el desprendimiento de células de piel muerta, destapa los poros, previene la inflamación de la piel.

Utiliza toallitas limpiadoras

Hazlo cuando tu piel se sienta pegajosa, sucia o grasa durante el día, ya que, al no ser muy ásperas ni agresivas con tu piel, mantienen tu piel fresca, limpia y equilibrada.

Luego de un día completo de exposición

Tus poros pueden obstruirse con residuos de maquillaje, exceso de grasa, suciedad, polvo y bacterias. Por eso, es importante remover todo rastro de maquillaje en la noche. Con estos simples consejos puedes lucir una piel radiante y llena de salud.

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