Invocan tolerar más a niños con el síndrome de Asperger
Por el Día Internacional del Síndrome de Asperger, el Seguro Social de Salud (EsSalud) presentó el caso de Jael, un adolescente de 16 años diagnosticado con esta condición y que tendría las características de genio, pues le gusta la física y la mecánica cuántica al igual que el físico Albert Einstein.
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El doctor Carlos Vera Escamarone, psiquiatra del hospital Grau, dijo que las personas con síndrome de Asperger como Jael están predestinadas para destacar en el campo de la música, el deporte, la ciencia, las matemáticas y la literatura, entre otras disciplinas.
Jael recibe atención integral en el servicio de Psiquiatría del Hospital Grau del EsSalud y su madre, Carmen Jaramillo, explicó que cuando tenía 5 años, su hijo terminó de leer su primer libro sobre el funcionamiento de los barcos, luego se centró en la medicina y el cuerpo humano, y siguió con la informática y más tarde la mecánica cuántica.
“Jael destaca sobre sus compañeros, pero tiene una debilidad, se le hizo imposible sociabilizar en el colegio”, dice su madre, pero las profesoras de su colegio afirman que ya tiene un nivel universitario.
El doctor Vera Escamarone explicó que las personas con síndrome de Asperger tienen problemas para hacer amigos, para captar los dobles sentidos y, en definitiva, para desenvolverse en situaciones sociales. Pero su inteligencia es normal y, en algunos casos, superior a la media.
Dijo que nuestra sociedad no está preparada para ser tolerante ante una persona con Asperger y termina excluyéndola, pues la principal característica de este síndrome es la dificultad de los pacientes para desarrollarse socialmente.
“Este trastorno del espectro autista es muy frecuente, siendo más habitual en niños. Las personas con esta condición son atendidas en Psiquiatría y Salud Mental y con esto, su desarrollo es bastante rápido y controlable, lo que facilitaría su inclusión en la sociedad”, dijo.
“Si la familia es tolerante y no lo presiona, este podría desarrollarse con muchas habilidades geniales que suelen tener. Pero, si no reciben apoyo de su núcleo familiar, podría haber un intento de suicidio. El verdadero tratamiento para ellos es la paciencia”, subrayó.
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