24/12/2020 / Exitosa Noticias / Cultural / Actualizado al 09/01/2023
◼ Por Dennis Alvaro
En estricto privado, los restos de José Bernardo de Tagle y Portocarrero, el IV marqués de Torre Tagle fueron exhumados ayer en el cementerio Presbítero Maestro, para ser trasladado a Trujillo, ciudad cuya independencia declaró hace 200 años, un 29 de diciembre.
Los restos del marqués de Torre Tagle fueron retirados del nicho que compartía con su segunda esposa, Mariana Echeverría Ulloa, marquesa de Torre Tagle, con quien tuvo tres hijos, y cuyos descendientes fueron los únicos presentes en la exhumación.
Los dos perecieron de escorbuto y otros enfermedades en 1825, durante al sitio del Real Felipe por las fuerzas patriotas entonces al mando de Simón Bolívar. Los cuerpos de Torre Tagle y su esposa fueron enterrados provisionalmente en un cementerio en Bellavista, hoy desaparecido.
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Superados los enconos que siguieron a la guerra de la independencia, y liberado el Perú del dominio español, las hijas de la pareja, que sobrevivieron al cerco en el Real Felipe, lograron trasladarlos a un nicho doble, en el pabellón Jesús María del antiguo Cementerio General de Lima, hoy Presbítero Maestro.
Torre Tagle tenía un par de meses en el cargo de intendente de Trujillo cuando desembarcó la Expedición Libertadora al mando del general José de San Martín en Pisco, el 8 de setiembre de 1820. Esa intendencia entonces era la capital de todo el norte peruano, que incluía Huaraz, Cajamarca y Amazonas.
Desde que desembarcó en Pisco, San Martín inició contacto epistolar con Torre Tagle, quien tenía parentesco político y amistad con el entonces director supremo de Chile, Bernardo O´Higgins, cuyo tío, Demetrio O´Higgins había sido el primer esposo de doña Mariana, quien se casó a los 16 años.
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En sus escritos, Torre Tagle afirma que participó en conspiraciones a favor de la independencia entre 1811 y 1812, pero fue electo diputado a las Cortes de Cádiz y se fue a España en 1813. Retornó a inicios de 1819, cuando el virreinato peruano iba a ser invadido por las fuerzas argentino-chilenas al mando de San Martín.
