12/10/2020 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Algunas de las iniciativas del Congreso, al igual que el despilfarro de recursos monetarios de Vizcarra y la ministra Alva, son peligrosas para la salud fiscal del país.
Pero el regular la tasa de interés de la banca, que llega a niveles de 150% anual y el sindicato de los bancos (ASBANC) y sus adláteres, mienten alevosamente con que los informales cobran 800%, como si su modalidad fuera de préstamos anuales, es nada “profesional”.
El editorial de El Comercio del sábado exhibido en su portal y edición diaria, es por demás vergonzoso y simplón.
Señala que la regulación desconoce la realidad del país y que su efecto neto es excluir a los más vulnerables del mercado formal y empujarlos hacia alternativas más costosas, y peligrosas.
Se apoya, tal cual lo hizo Asbanc, en un documento del año 2013, con una encuesta de lo más simplona para Lima Metropolitana por teléfono a 12 oferentes que promocionaban préstamos en periódicos y a 18 dueños de mercados de abastos.
Una barbaridad metodológica, máxime si aducían que les llamó la atención los niveles de costo de TCEA con pagos diarios de gota a gota, de más de diez mil por ciento anual (10,488 %). Algo ocasional y delincuencial.
Y a esta barbaridad, el editorial se apoya en otra encuesta del BCRP realizada a mypes y micro financieras con tasa promedio del 20% por mes y que exponenciado casi llega a un 800% algo inexistente en la “informalidad”.
Traer a colación a Chile, Colombia y hasta Bolivia, señalando exclusión de personas por haber regulado la tasa, es por demás absurdo. Chile lo hizo en el 2013 y ello permanece así, lo que le quita sustento al editorial.
Máxime que los bancos en Perú apenas bancarizan un 51% y más que nada por los cajeros y los pagos tipo “Yape”.
Con inflación del 2%; una tasa del 150% anual es insostenible, como lo es la miseria que pagan los bancos a los ahorristas.
