15/10/2020 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 09/01/2023
Atención. Este jueves, el alcalde de Ventanilla, Pedro Spadaro, señaló en Exitosa, que su postura es cerrar definitivamente todas las playas de su distrito durante el próximo verano, ya que será imposible humanamente tener un control con los miles de bañistas que lleguen a esta zona del país.
En conversación para el programa Hablemos Claro de Exitosa, el burgomaestre indicó que no hay medida que garantice que las playas de su distrito, no se conviertan en un foco infeccioso, ya que con los millones de bañistas que llegaran a los balnearios el contagio del COVID-19 siempre será latente.
“Nosotros tenemos ocho kilómetros de playas, la segunda más grande de Sudamérica después de Río de Janeiro, y por eso, es imposible materialmente y humanamente controlar una posible situación como se viene cuestionando. Proponemos el cierre total y que evidentemente, se pueda dejar acceder a las personas que hagan deporte, como lo estamos haciendo ahora caminatas, running y otros, pero de ahí a permitir que el espacio se convierta en una zona de recreación pública, eso no va a pasar”, manifestó.
En esa línea, el alcalde contó que junto a su similar del Callao, tuvieron una reunión donde también compartieron las mismas precisiones sobre el cierre de playas de forma definitiva con miras al próximo verano.
“Nos reunimos con el Gobernador del Callao, el alcalde Provincial del Callao y todos los demás alcaldes de la región, donde hemos firmado un pronunciamiento, donde solicitamos respetuosamente al señor presidente de la República (Martín Vizcarra), que tome una decisión que nosotros consideramos, como el cierre total de las playas del litoral del Callao”, anunció.
Por otro lado, Spadaro puso como ejemplo que con 500 personas de seguridad ni si quiera alcanzaría establecer un mínimo orden en las playas del distrito en una eventual apertura de playas.
“En primer lugar serían 500 personas que no las tenemos, tendríamos que garantizar que entren de a pocos a las playas, es humanamente imposible. Muchas veces se hacen los protocolos en un escritorio, sin conocer la realidad. Muchos veraneantes no vienen en turnos, llega a las ocho de la mañana y se van a las seis de la tarde. Tampoco se asegura que el grupo que venga sea todos del núcleo familiar. Esto será un foco de contagio con los kilómetros de colas para toma de temperaturas”, sentenció.
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