05/03/2020 / Exitosa Noticias / Uncategorized / Actualizado al 09/01/2023
Las mujeres con discapacidad acceden a menos puestos de empleo respecto a los hombres a nivel nacional, según el censo realizado por el INEI el 2018, informó el proyecto Género y Discapacidad.
De acuerdo al informe, en el Perú el 31% de mujeres con discapacidad trabaja frente al 49.7% de hombres en esa condición, y esto se debe a que ellas enfrentan más barreras de acceso al mundo laboral. El sondeo también señala que más mujeres con discapacidad (46.1%) que hombres (37.3%) tienen un ingreso promedio menor al sueldo mínimo que actualmente es de S/930 mensuales.
Trabajadoras sí, violentadas no
Por esta razón, el colectivo de mujeres con discapacidad realizará este sábado 7 de marzo a las 3 p.m. una acción de demanda denominada “Trabajadoras Sí, Violentadas No” en el cruce de la avenida Salaverry y Nazca (Jesús María) para visibilizar la problemática y trabas que enfrentan cuando buscan postular a un puesto de trabajo.
Asimismo el colectivo de mujeres con discapacidad participará de la marcha por el 8M junto a más de 100 organizaciones feministas, sindicales y de mujeres reclamando por el respeto de sus derechos y en rechazo a todos los tipos de violencia, en especial en el ámbito laboral.
Según un estudio del Fondo de Población de las Naciones Unidas (2016), las mujeres con discapacidad, afrontan mayores desventajas pues las desigualdades de género y la situación de discapacidad genera una discriminación múltiple que se refleja en diferentes ámbitos.
“Las mujeres con discapacidad física, visual, intelectual, entre otras, reclamamos por la continua discriminación y violencia que nos afecta cuando buscamos acceder a una oportunidad laboral y por la carencia de un transporte accesible que nos permita ser económicamente independientes”, explicó Rosa María Juárez, vocera del proyecto “Impulsando el derecho de las mujeres con discapacidad a una vida libre de violencia y discriminación en Perú”.
Asimismo, dio a conocer que además de la violencia física o psicológica, el colectivo de mujeres con discapacidad se considera también violentadas cuando ignoran sus capacidades, cuando no se cumple con la cuota laboral, o cuando no son incluidas en las políticas de género.