15/08/2023 / Exitosa Noticias / Salud / Actualizado al 15/08/2023
El hábito de dormir la siesta después de comer ha sido una de las costumbres ancestrales que muchas personas lo han desarrollado por generaciones; sin embargo, ¿existirá alguna razón médica para que se pueda realizar? Algunos apuntan que esta actividad podría reducir la hipertensión.
¿Qué es la presión arterial y cómo se mide?
Es conocida como la fuerza de la sangre al empujar las arterias. Por ende, se puede manifestar que es más alta cuando el corazón se encuentra en el proceso de latido (bombeando sangre), presión sistólica. Mientras que si el corazón se encuentra en estado de reposo, la presión arterial se reduce, presión diastólica.
Para medir la presión se debe hacer uso de un estetoscopio o sensor electrónico.
Investigación: siesta combate hipertensión
Según investigaciones, mencionan que dormir la siesta después de comer reduce significativamente la presión arterial, casi de la misma manera, como lo hacen algunos fármacos que son utilizados para tal fin.
Acorde a los datos, un pequeño periodo de descanso de media hora podría generar una reducción de 5 mm Hg. Si el periodo se extiende a una hora, se observa una mejora de 3 mm Hg en relación a un día.
Cabe mencionar que en este estudio participaron 212 personas con una medida relativamente alta de presión arterial 129,9 mm Hg, tomada en el plazo de 24 horas. La edad de los pacientes era de 62 años y mayoritariamente eran personas de público femenino. Asimismo, la proporción de 1 a 4 se caracterizaba por el padecimiento de alguna dolencia, entre los que se encuentran la diabetes tipo 2, o hábitos como fumar.
La particularidad de esta investigación es la división de la población, entre los que sí dormían la siesta y los que no realizaban esta actividad. Agregado a ello, se sumaban algunas costumbres personales como el consumo de alcohol, café y altos niveles de ingesta de sal; condiciones que impactan en la velocidad de la onda del pulso.
Resultados
En un día la presión arterial sistólica fue de 5,3 mm Hg más baja en las personas que sí dormían la siesta de los que no lo realizaban. En esa línea, se estableció que las personas que descansaban en promedio una hora después de comer su presión se reducía en 3 mm Hg.
La investigación también sugirió que llevar una dieta equilibrada añadida a un descanso adecuado ayudan enormemente a reducir los niveles de tensión arterial.
De esta manera, conocimos qué es la presión arterial y cómo medirla; asimismo, cómo una siesta diaria podría ayudar a las personas a bajar considerablemente la hipertensión y llevar una vida más sana.