Política

Ramos será ponente sobre demanda de Pedro Olaechea

El TC decidió que el magistrado tenga a cargo la ponencia sobre demanda contra la disolución del Congreso. Esta será escuchada el 29 de este mes.
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18-10-2019

Por mayoría, el Tribunal Constitucional (TC) eligió a Carlos Ramos Núñez como el magistrado que tendrá a su cargo la ponencia de la presentación de un borrador sobre si se admite o no a trámite la demanda competencial presentada por el titular de Comisión Permanente, Pedro Olaechea, contra la disolución del Congreso.

Fueron los tribunos Manuel Miranda, Marianella Ledesma, Eloy Espinosa-Saldaña y el mismo Ramos, quienes escogieron a este último ponente, contra los votos de Ernesto Blume, José Luis Sardón y Augusto Ferrero.

La ponencia sobre la demanda competencial presentada por Pedro Olaechea será escuchada el martes 29 de octubre.

En declaraciones a la prensa, el tribuno Carlos Ramos señaló que "primero hay que decidir si se admitirá o no la demanda competencial".

"El tribunal tiene la autonomía y creo que lo ha demostrado en todo este tiempo de actuación en casos emblemáticos. Es una responsabilidad de carácter histórica y de enorme compromiso para todos nosotros", señaló, al referir que no considera que exista un adelanto de opinión.

Proceso

Ramos Núñez tendrá que elaborar el informe que luego será entregado a los otros magistrados del TC, luego se acordará una fecha para el debate del mismo y, posteriormente, se decidirá si se admite o no la demanda competencial, en una votación por unanimidad o en mayoría.

Cabe recordar que además de presentar la nulidad de la disolución del Parlamento, la demanda de Olaechea pide también a los magistrados que defina si el Ejecutivo tiene competencia para plantear una cuestión de confianza sobre atribuciones del Legislativo. Ello en referencia al planteamiento que el Gobierno presentó sobre el proceso de selección de magistrados del TC, el 30 de setiembre.

Asimismo, Olaechea solicita al TC que defina que la cuestión de confianza solo puede ser otorgada por el Congreso de manera expresa a través de una votación en el pleno y no de manera tácita o fáctica.