Productores dejan el café y van a zonas que cultivan coca
Productores cafetaleros de la selva central vienen migrando hacia las zonas de cultivo de coca en busca de trabajo, ello luego que registraran pérdidas en la producción de café por cuarto año consecutivo, alertó la Junta Nacional de Café (JNC).
El presidente de la JNC, Tomás Córdova, explicó que desde fines de diciembre de 2018, y con mayor frecuencia en enero y febrero de este año, cientos de productores se trasladan al día desde Satipo, Puerto Ocopa y río Tambo, en la selva central, hacia las plantaciones de coca en la cuenca del Río Apurímac, en busca de empleo, pues los salarios diarios en esa zona oscilan entre S/ 70 y S/ 120.
Agregó que similar panorama se observa en los cafetaleros de Alto Mayo, en la región San Martín, quienes se dirigen hacia el sur, hacia tradicionales pueblos cocaleros del Alto Huallaga, en donde el rebote de la coca se ha incrementado en los últimos años, lo cual coincide con los reportes recientes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Precisó que Puno es la región más afectada con el incremento de cultivo de coca, pues hace 10 años en esa zona se cultivaban 9 mil hectáreas, con una cosecha de 160 mil quintales de café, pero en el 2018 apenas se recogieron 40 mil quintales, en 2,800 hectáreas.
“Lo más grave es la indiferencia de las autoridades de todos los niveles a esta crisis económica, social y de seguridad. Por esto la gente tiene que abandonar los cafetales para sobrevivir en otros trabajos”, sostuvo Córdova.
Alerta de la ONU
Meses atrás la ONU ya había dado la alerta. Según explica el presidente de la JNC, este organismo internacional informó en el 2017 la extensión de coca llegaba a las 50 mil hectáreas, lo que representaba un aumento de 22% frente a lo reportado en el año 2015, cuando reportó 40 mil hectáreas.
Por su parte, la USAID estimó para el 2018 una producción de 491 mil kilos de clorhidrato de cocaína, para lo cual se requieren cultivar 76 mil hectáreas y una cosecha de 184 mil toneladas de hoja de coca seca.
-De acuerdo con la JNC, en el 2018 se retuvieron las liquidaciones de las ventas de café orgánico hacia Alemania, ello mientras se esperaba las certificaciones en laboratorios europeos de la carencia de diversos insecticidas.
-Para la entidad, esta es una grave amenaza a las exportaciones al café peruano hacia Europa, continente al cual se destina el 65% del grano verde.
-Señaló, además, que en recientes eventos feriales en Europa se rechazaron 10 contenedores de café orgánico de selva central y del nororiente, y no se llegaron a definir venta de otros 30 lotes que esperaban resultados de análisis.