13/09/2019 / Exitosa Noticias / Política / Actualizado al 09/01/2023
El ministro de Cultura, Luis Jaime Castillo, rechazó que tenga una posición anti minera y recalcó que todos los peruanos quieren una minería responsable, que nos ayude a crecer a través de la inversión en educación, salud y vivienda.
Fue luego que algunos medios locales señalaran que el alto funcionario criticó la relación de las inversiones mineras con los índices de pobreza de las comunidades campesinas.
“Después de ver este drama que se había presentado frente a nuestros ojos, las conclusiones que habíamos llegado es que las mineras eran una oportunidad para las comunidades y que esta es una oportunidad que puede traer progreso y queda claro que si no aprovechan esa oportunidad, cuando la mina se vaya, ustedes van a quedar igual de pobres” aseveró en el programa Hablemos Claro de Radio y TV Exitosa.
Luis Jaime Castillo manifestó que en las trece comunidades que visitó junto al ministro de Energía y Minas en la provincia de Espinar (Cusco) no había agua, tampoco desagüe y que los recursos de salud y educación eran limitados.
“Lo primero es que nosotros no somos anti mineros, lo que queremos es una minería responsable. Lo que quedamos fue en ir al campo y el ministro Ismodes y yo estuvimos todo el viernes, visitando una comunidad tras otra, hasta la noche” comentó.
Añadió, también, que la población se reunió con la ministra del Ambiente, Lucia Ruiz, para atender las necesidades de la población, que durante mucho tiempo no han sido escuchados.
“Luz, agua, desagüe, educación y salud, es una plataforma, paradigmática que hay que plantear en la relación comunidad - empresa minera, donde evidentemente, la primera responsabilidad la tiene el Estado, el gobierno regional y el gobierno municipal” precisó.
Responsable
En otro momento, Castillo afirmó que se debe buscar la presencia de una minería responsable, donde la gente acepta la labor de desarrollo, que se realizaría en la población. Agregó que las comunidades nativas no rechazaban la minería, pero que esta opinión cambió cuando la minería no cumplió con algunas de sus responsabilidades con la población.
“Las minas pagan una enorme cantidad de dinero en regalías, en canon, ese dinero mayoritariamente viene a parar en las arcas de los gobiernos regionales y provinciales” acotó.
De acuerdo a Susanne Friess, asesora en minería y desarrollo sostenible de Misereor, "la actividad minera tiene un alto impacto sobre el acceso al territorio y recursos como el agua. En muchos casos las minas están justamente en donde nace el agua, por lo que el conflicto surge ya en el momento en que la empresa pide la concesión”.