06/07/2019 / Exitosa Noticias / Política / Actualizado al 09/01/2023
El fiscal superior Rafael Vela Barba, coordinador del Equipo Especial del caso Lava Jato, denunció hace unos días que existiría un plan estratégico para favorecer a la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, en las investigaciones por el caso Odebrecht. Estas evidencias estarían saliendo a la luz con revelaciones que pondrá en aprietos a muchos magistrados.
Un aspirante a colaborador eficaz, con código 2017-55-11, reveló al equipo especial que la excandidata presidencial supuestamente hizo “gestiones especiales” con Guido Aguila, cuando era presidente del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), para que no ratifique a la jueza Edita Condori en su cargo.
De esta manera, la lideresa fujimorista habría buscado evitar que la magistrada sea ratificada y sacarla de la sala que evaluaría el pedido de control de plazo solicitado por su abogada Giulliana Loza y la de su partido, Fuerza Popular.
El colaborador habría declarado ante la Fiscalía que Fujimori y sus abogados, Edward García y Giulliana Loza, estaban preocupados por “la investigación de los aportes del partido Fuerza Popular para las campañas presidenciales del 2011 y 2016”.
De esa manera, según IDL Reporteros, buscaban ver la mejor manera de controlar o dirigir la investigación a cargo del fiscal José Domingo Pérez. En palabras del aspirante, Keiko Fujimori la quería fuera “por ser contraria a sus intereses en las investigaciones” que se le seguían.
Antifujimorista
Según las revelaciones del colaborador, Keiko tenía información de que la jueza superior Edita Condori era antifujimorista. De acuerdo con el testimonio, en febrero de 2018, Fujimori le aseguró a Jaime Yoshiyama que “el tema está coordinado con el consejero Guido Aguila”.
Asimismo, el declarante recuerda que en ese momento la fujimorista llamó por WhatsApp a Aguila y que tuvieron “una conversación amical de algunos minutos”. En esa conversación, la excandidata presidencial le dijo al consejero que “no se olvide de atender su encargo”.
Sin embargo, un par de meses después, Condori fue ratificada por cuatro votos a favor y tres en contra. Al final, explicó el aspirante a colaborador, hubo un problema con el consejero Iván Noguera, pues “no había votado como Fujimori deseaba”.
“En mayo de 2018, Keiko Fujimori aprovechó una reunión con Noguera para reclamarle por la ratificación de la jueza. Este le pidió disculpas por esa votación y que buscaría arreglarlo, solicitando una especie de nueva votación o reconsideración de la votación”, señaló el colaborador.
Fiscal supremo cuestionado
Otro punto que demostraría sospechas de apoyo a Keiko Fujimori, es la votación para la inhibición del fiscal supremo Víctor Rodríguez. En junta de fiscales, solo la fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, votó a favor, mientras que el fiscal supremo Pablo Sánchez se abstuvo. Los demás fiscales supremos decidieron que el magistrado siga en el proceso de la lideresa del fujimorismo.
Carlos Tubino denuncia “mano negra” en el caso Fujimori
Tras suspensión de la audiencia de casación de la lideresa de Fuerza Popular, el vocero Carlos Tubino dijo que existen “manos negras” que están tratando que Keiko Fujimori continúe encarcelada cumpliendo una prisión preventiva injusta.
El parlamentario hizo un llamado para que el pedido de casación no tenga interferencia política como lo establece el sistema de justicia anteponiendo la presunción de inocencia.
“Las fundamentaciones de su libertad era lo que hoy (ayer) se iba a presentar de forma jurídica, donde no debe de haber interferencias políticas, que hace sospechar que hay otros intereses. La Corte Suprema vea esto con sensibilidad y haciendo justicia”, afirmó.
Keiko Fujimori cumple una prisión preventiva por 36 meses, por haber recibido financiamiento en su campaña presidencial del 2011.