Factor A.F: Vladimiro Montesinos, el siniestro asesor
Por: Blanca Temoche
¿Quién era ese personaje detrás de las acciones de Inteligencia que no daba la cara, pero que era el personaje misterioso detrás del poder? Su nombre Vladimiro Montesinos, nacido en Arequipa en 1945. Se formó en la Escuela Militar, pero fue expulsado del Ejército en 1977 acusado de colaborar con la CIA en perjuicio del país. Luego, estudió Derecho y ejerció la defensa de policías y narcotraficantes acusados de violentar los derechos humanos.
Fue asesor presidencial en cuestiones de seguridad del presidente Alberto Fujimori. Fue considerado como la mano derecha del mandatario y tuvo a su cargo el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN).
Es señalado como el autor de la creación del Grupo Colina para combatir el terrorismo, así como para hacer labor de espionaje a entidades y personajes opositores al gobierno. Su apodo era 'Rasputín'.
Desde 2001 se encuentra preso en una base naval de Lima tras ser extraditado por Venezuela, cuando gobernaba Hugo Chávez, a pedido del gobierno peruano.
Cumple condena de 25 años por corrupción y crímenes de lesa humanidad por la matanza de 15 personas en Barrios Altos y la desaparición forzada de 9 estudiantes y un profesor de la universidad La Cantuta.
Pero, cinco años después, un tribunal lo condenó a 22 años por la muerte y cremación de tres personas. Se refería a los dos estudiantes y el profesor detenidos en 1993 por una patrulla militar en la Universidad Técnica del Callao.
Los primeros años de encarcelamiento lo llevaron a escribir hasta el punto de publicar su primer libro denominado Operación Chavín de Huántar, con el terrorismo no se negocia, sobre la toma y rescate de rehenes de la embajada del Japón en Lima cuando gobernaba Fujimori.
Ha enfrentado más de 60 procesos, que van desde delitos de desviación de fondos de las fuerzas armadas, corrupción, violaciones de derechos humanos, narcotráfico e incluso la venta de armas a las FARC.
El tribunal que condenó a Montesinos también reveló en sus conclusiones que los tres desaparecidos fueron asesinados y sus cuerpos quemados en un horno en los sótanos del servicio de inteligencia del Ejército, en Lima.
La salita del SIN
Vladimiro Montesinos era muy ordenado y ostentoso para sus cosas. Todo lo quería tener controlado y, por eso, del perfil bajo que permaneció durante años, comenzó a contar con oficina propia en el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), donde se reunía con Alberto Fujimori y que alguna vez la familia debió refugiarse después del autogolpe. Es ahí donde el hijo menor del expresidente Kenji Fujimori lo grabó a un distraído Montesinos que no tuvo más remedio que sonreír.
El 'Doc' contaba con su secretaria personal, Matilde Pinchi Pinchi, que coordinaba las reuniones y que supo que los encuentros con todos los personajes eran grabados como se supo casi al final del régimen.
Por ahí desfilaban, artistas de la televisión, empresarios, políticos, y todo aquel que pudiera ser empleado para levantar la imagen del gobierno. Lo que los visitantes no sabían era que todo se grababa en video. Esas historias ya le contaremos.
MAÑANA: SU SEGUNDO GOBIERNO Y LA TOMA DE LOS REHENES.