En manos de la JNJ evaluación de los 2,400 jueces y fiscales
Dos mil cuatrocientos casos de evaluación y ratificación de jueces y fiscales de todo rango están en la mira de la flamante Junta Nacional de Justicia. Muchos de ellos no podrían continuar en sus cargos. Así lo manifestó el presidente de esta entidad, Aldo Vásquez Ríos.
En entrevista con Nicolás Lúcar para el programa 'Hablemos claro' de la plataforma radiotelevisiva de Exitosa, el funcionario comentó también que aún están a la expectativa por saber quién será el sétimo miembro de su junta tras los cuestionamientos a Marco Tulio Falconí.
“Se va a revisar esos 2,400 expedientes, entre las cuales hay algunos que corresponden a fiscales supremos y jueces supremos. El mandato de la ley es que debemos hacer una revisión exhaustiva de aquellos casos donde hay indicios graves, irregularidades, que podrían llegar incluso a la nulidad de las ratificaciones”, afirmó.
Sin dar nombres ni referirse a casos en especial, el titular de la recientemente constituida Junta Nacional de Justicia aclaró que hay denuncias que pesan sobre magistrados supremos que laboran en el Poder Judicial y el Ministerio Público.
“Por ejemplo, hay fiscales supremos y jueces supremos que tienen denuncias que están pendientes de ser atendidas en la Junta Nacional de Justicia. En los próximos días, vamos a iniciar la calificación de estas denuncias para eventualmente iniciar el proceso de investigación. Podríamos, eventualmente, de oficio, iniciar las investigaciones respecto de cualquier juez y fiscal supremo, incluso la ley orgánica de la Junta Nacional de Justicia nos habilita para en determinados casos iniciar investigaciones”, manifestó.
Vásquez Ríos reveló además que tienen solo 102 trabajadores de un total de 280 que agrupaba el desactivado Consejo Nacional de la Magistratura, por lo que laboran arduamente para componer todas las áreas y funcionar sin problema alguno. Señaló que buscarán a los más calificados para que accedan a las magistraturas”.
“Tenemos que construir un modelo de selección de magistrados que garantice la idoneidad de jueces y fiscales con carácter profesional y ético. Entonces, ahí tenemos una tarea clave, una tarea que supone articulación. La sociedad tiene que percibir a la judicatura como una opción de desarrollo profesional y desarrollo personal, y decidir por los profesionales del derecho más competentes, más involucrados en su entorno para que puedan ser jueces y fiscales como ocurre en otros países”, sentenció el titular de la JNJ.
EL SÉTIMO MIEMBRO
Luego de la polémica desatada alrededor del caso de Marco Tulio Falconí, por sus comunicaciones con César Hinostroza y un aparente favorecimiento con una bonificación que no la merece, Vásquez aseguró que siguen en compás de espera del último integrante de la JNJ.
“Estamos en sesión permanente los seis miembros de la Junta Nacional de Justicia y a la expectativa de la decisión que adopte la comisión especial, respecto de quién será el séptimo miembro. (Los 6 juramentados) somos personas con una trayectoria profesional y una actividad privada respetable”, manifestó.