Defensoría del Pueblo: "Constatamos con pesar que se ha perdido sensibilidad para valorar la vida"
La Defensoría del Pueblo emitió, la tarde de hoy, un pronunciamiento tras la primera víctima mortal y heridos tras la protesta del día de ayer. En esa línea precisó que se ha perdido la sensibilidad en valorar la vida de las personas que salen a manifestarse, los cuales, no deberían ser parte de un 'costo social' o 'daño colateral' en el contexto convulso de los últimos días.
Pronunciamiento
La primera parte del comunicado contextualiza el hecho de todo ciudadano que periódicamente ejerce su derecho al voto y, como tal, espera vivir en una democracia que respete prioritariamente la vida de cada uno de ellos que confió en sus autoridades al elegirlos.
"Los peruanos y peruanas ratificamos periódicamente, mediante el voto popular, nuestra fe en la democracia. Y esperamos que esa democracia considere prioritaria la vida de cada uno de nosotros [...] Todos y todas, cuyas historias no pueden ser interrumpidas por balas, pedradas o fuego", señala en un primer momento la Defensoría del Pueblo.
Seguidamente, lamenta que en el contexto actual de crisis política-social se haya perdido la humanidad al tratarse las muertes de los ciudadanos por motivo del ejercicio de su derecho a la protesta.
"Constatamos con pesar que se ha perdido sensibilidad para valorar la vida; entonces, se la expone o se la ataca sin considerar su condición única e irrepetible", puntualiza el órgano constitucional.
En esa línea, la Defensoría del Pueblo enfatiza que "La muerte de personas en protestas no es 'costo social', ni 'daño colateral'".
También se refiere al actuar político que podría "pacificar y cambiar el rumbo trágico de estos días".
"El Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo pueden hacerlo. Cada día que pasa, la vida de alguien está en peligro, y la democracia ... se va deshaciendo ante nuestros ojos", agrega.
Finalmente, el órgano constitucional menciona su actuación en las diferentes instituciones como hospitales, comisarías, zonas de las marchas y su comunicación activa con entidades estatales y organizaciones sociales.