Alejandra Aramayo renuncia como jefa de Comunicaciones del Congreso: "Las instituciones están encima de las personas"
Alejandra Aramayo, quien se desempeñó como jefa de la Oficina de Comunicaciones e Imagen Institucional del Congreso, presentó su renuncia al cargo el pasado 4 de marzo. En una carta enviada al presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, la excongresista expresó que su decisión está motivada por la exposición de temas personales, los cuales considera ajenos a su labor pública.
La renuncia se produce días después de la difusión de un reportaje del programa "Cuarto Poder" que reveló que Aramayo enfrenta un proceso judicial ante el Poder Judicial, relacionado con una disputa familiar por la repartición de propiedades en Puno.
Este conflicto involucra a su madre y hermanos, y ha sido ampliamente difundido en los medios de comunicación. La exparlamentaria se mostró contrariada por la divulgación de detalles que considera privados y aseguró que dichos temas no debieron haber sido expuestos al público.
En su misiva, Aramayo expresó que se siente desilusionada por cómo se han distorsionado ciertos hechos y se ha puesto en duda su integridad. No obstante, destacó que valora la confianza y autonomía que le otorgó Salhuana al asignarle la jefatura de Comunicaciones del Congreso en octubre de 2024, y agradeció por la oportunidad brindada.
Conflicto familiar y proceso judicial
La disputa legal que involucra a Aramayo se centra en una demanda presentada por ella contra su madre y sus hermanos, con el objetivo de incluirse en la repartición de un inmueble ubicado en Puno. La exlegisladora argumenta que debe ser considerada en la distribución de esta propiedad, que su madre había otorgado previamente como herencia anticipada a otros miembros de la familia
Sin embargo, la situación judicial ha tomado un giro negativo para Aramayo. En noviembre de 2024, el Tercer Juzgado Especializado en lo Civil de Puno declaró improcedente su demanda. El juez determinó que la madre de la excongresista tenía pleno derecho a disponer de sus bienes como lo considerara conveniente.
Vilma Gaona, madre de la exparlamentaria, ha defendido su decisión de repartir los bienes de la manera que lo hizo, explicando que Aramayo ya había recibido otras propiedades, incluida una vivienda en Arequipa, además de dinero en efectivo.
Desvinculación tras el conflicto mediático
Con la renuncia de Aramayo a la jefatura de Comunicaciones e Imagen Institucional, el Congreso de la República se enfrenta a un cambio en su equipo de trabajo. La decisión de la excongresista pone fin a su breve paso por la administración del área de comunicaciones del Legislativo, en medio de un contexto de controversias personales que han trascendido al ámbito público.