06/01/2021 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 09/01/2023
Hoy debió ser un acto protocolar donde los nuevos miembros de la Cámara de Representantes y el Senado cuentan y certifican los votos del Colegio Electoral, que proclama al demócrata Joe Biden como el próximo presidente. Sin embargo, eso no ocurrirá si una facción de republicanos objeta los resultados.
El presidente saliente Donald Trump hasta ahora se niega a aceptar el triunfo del demócrata y ha interpuesto una serie de demandas que fueron desestimadas por los jueces para que se anule la decisión de los Estados de elegir a los comités electorales que proclaman al presidente.
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Ante ello, Trump tiene la última oportunidad de impedirlo, y por ello está intentando convencer a su vicepresidente Mike Pence, que debe presidir esta sesión para que apoye una demanda que harán un grupo de legisladores republicanos.
La principal apuesta de Trump está depositada en lo que pueda hacer Pence. “El vicepresidente tiene el poder de rechazar a los electores elegidos fraudulentamente”, tuiteó Trump este martes a la mañana, en un intento de presionar a quien lo acompañó durante sus cuatro años de gobierno.
Cuando se terminan de leer los votos de los 50 estados, se procede al recuento final. En este caso, 306 para Joe Biden y 232 para Donald Trump. Finalmente, el vicepresidente ratifica el resultado y proclama formalmente al ganador.
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Si Trump y sus seguidores tienen ciertas expectativas es porque hay una instancia en la que los legisladores pueden impugnar los resultados. Cada vez que se anuncian los votos de un estado, el vicepresidente pregunta si alguien tiene alguna objeción. Basta que un senador y un congresista se pongan de acuerdo para que se interrumpa el recuento y la queja sea analizada.
◼ Sin posibilidades
Para que esta posibilidad de impedir el triunfo de Biden, los seguidores de Trump deben convencer a ambas cámaras de anular los resultados, pero solo tienen control del Senado. El senador republicano Mitt Romney ya se pronunció y dijo que era “una atroz estratagema” que “amenaza peligrosamente a la república democrática”.