¡Terrible!
27/06/2024 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 27/06/2024
Un conocido gimnasio fue el centro de una verdadera tragedia, luego de que una joven resbalara en una caminadora y cayera desde el tercer piso del establecimiento, falleciendo de forma brutal.
Esto ocurrió en la ciudad de Pontianak, en Kalimantan Occidental, Indonesia, y tuvo como víctima a una chica de apenas 22 años. De acuerdo a los informes policiales, la muchacha se encontraba usando una cinta de correr tradicional, cuando repentinamente perdió la estabilidad y cayó.
Si bien no pareciera haber sufrido más que una dura caída, la chica perdió el control, atravesando el vidrio de protección del piso, y cayendo desde varios metros de altura. Inmediatamente, se le trasladó a un hospital de emergencia.
Cronología de una tragedia
El hecho fue registrado en cámaras de video, lo que terminó causando el cierre del local, y el inicio de una serie de investigaciones por un caso de negligencia.
La víctima fue identificada con las siglas FN, y el reporte oficial señala que acudió al gimnasio como venía haciéndolo hace ya varios meses. Se mantuvo entrenando de forma normal, hasta que se subió a la cinta de correr, en donde estuvo casi 30 minutos.
Poco a poco fue reduciendo la velocidad, hasta que un desperfecto de la máquina habría causado su caída y posterior muerte por una hemorragia en la cabeza, además de hematomas importantes en el cuerpo y la cara.
Poca seguridad
Según los reportes de las autoridades, la cinta de correr se encontraba a 60 centímetros de distancia de la ventana. El espacio de ventilación, por su lado, tenía 90 centímetros de ancho, y era tan corto que solo dejaba 30 centímetros entre el vidrio y el piso.
Entre el agotamiento del ejercicio y la poca orientación, la joven terminó al borde del desvanecimiento, por lo que en un intento de tocar piso, se dejó caer hacia atrás, encontrando la muerte.
Lo que más indignó a los investigadores es que la ventana tenía un fino vidrio de pocos milímetros de espesor, lo que no garantizaba ningún tipo de seguridad.
Por su parte, el dueño del gimnasio enfrentará cargos en su contra, además de que encargó a sus trabajadores colocar las cintas de cara a las ventanas, en busca de reducir cualquier posibilidad de que ocurra algo similar.
Lamentablemente, este gimnasio en Indonesia fue el centro de una tragedia, en donde una joven resbaló en una caminadora y murió tras caer de un tercer piso.
