25/03/2020 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 09/01/2023
Italia es el país que registra el mayor número de muertos por el coronavirus (COVID-19). Pese a las noticias trágicas que se conocen del país transalpino por dicha enfermedad, hay una historia que nos hace confiar aún en la humanidad.
El sacerdote italiano Giuseppe Berardelli, de 72 años, fue diagnosticado con COVID-19. En vez de continuar con su tratamiento, el padre renunció al respirador artificial que lo mantenía con vida para entregárselo a alguien más joven que él. Por desgracia, el religioso falleció hace pocas semanas, pero su historia empieza a ser contada en el mundo.
Italia es el país que registra el mayor número de muertos por el coronavirus (COVID-19). Pese a las noticias trágicas que se conocen del país transalpino por dicha enfermedad, hay una historia que nos hace confiar aún en la humanidad.Según narraron medios italianos, el drama comenzó cuando el padre Giuseppe Berardelli fue diagnosticado con coronavirus e ingresó al Hospital de Lovere. Berardelli perteneció a la diócesis italiana de Bergamo, ciudad que aglomera más muertos por la enfermedad de Wuhan.
Una vez internado, la salud del cura empeoró cuando el centro médico se vio superado por la gran cantidad de pacientes diagnosticados con la pandemia. Para ayudarlo, la comunidad parroquial decidió adquirir un respirador. Sin embargo, el sacerdote se negó rotundamente a usar el aparato y pidió que se la entreguen a alguien más joven que él, para salvar a alguien más.
El noble gesto fue obedecido por los médicos del centro hospitalario, y a los pocos días Berardelli dejó de existir para tristeza de la comunidad de Lovere, aunque todos reconocieron que partió como un héroe.