Oposición protesta contra el gobierno de Bolivia, que alerta sobre "golpe de Estado"
La oposición boliviana bloqueó este lunes las calles de las principales ciudades del país en protesta contra del gobierno izquierdista del presidente Luis Arce, quien reiteró que sus adversarios buscan crear condiciones "para un golpe de Estado".
A un mes de cumplir su primer año de gobierno, Luis Arce enfrenta las primeras protestas contra su gestión, por parte de opositores que lo acusan de impulsar juicios políticos y buscar aprobar una draconiana ley de investigación de fortunas.
La policía respondió dispersando a pequeños grupos de manifestantes en La Paz y Cochabamba (centro) con gases lacrimógenos, a un mes de que el mandatario cumpla un año en el cargo. Se registró una nutrida marcha de sindicatos de comerciantes al menudeo, que aunque no forman parte del bloque opositor, rechazan la "Ley contra la legitimación de ganancias ilícitas y financiamiento del terrorismo", en discusión en el Parlamento.
En el centro de la ciudad, sede de los poderes Ejecutivo y Legislativo, la policía hizo uso de gases lacrimógenos para dispersar un cierre de avenidas, y también se registraron amagos de choques callejeros con grupos oficialistas, sin reportarse heridos.
En Cochabamba la policía también disparó gases antidisturbios, y detuvo al menos a dos personas. En Santa Cruz, bastión de la oposición de derecha, hubo una paralización casi total de la ciudad. En las tres ciudades el transporte público fue exiguo, aunque la banca privada y la administración pública operaron con normalidad.
El jefe de la policía, Jhonny Aguilera, reconoció que en las regiones de "Cochabamba y Santa Cruz" hay "bloqueos esporádicos que están siendo monitoreados", mientras el ministro de Gobierno (Interior) aseguró que en el resto de los siete departamentos "existe absoluta normalidad".
OFICIALISMO ALERTA SOBRE "GOLPE DE ESTADO"
El presidente Arce, de 58 años, reprochó en un evento público las movilizaciones de los opositores que - según él - pretenden desestabilizar su administración.
"La conspiración antidemocrática no ha sido definitivamente derrotada con las elecciones del año pasado. Vuelve a alzar la cabeza, promoviendo disturbios y la desunión entre bolivianas y bolivianos, para crear las condiciones de un nuevo golpe de Estado", aseveró.
Más en Exitosa