14/07/2023 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 14/07/2023
Los estudios de Hollywood fueron acusados de engañar a los actores para prolongar las negociaciones sobre la huelga y tener más tiempo para promocionar sus películas taquilleras de verano, según Fran Drescher, presidenta del Sindicato de Actores de la Pantalla (SAG-AFTRA). El sindicato había retrasado inicialmente el plazo de la huelga con la esperanza de llegar a un acuerdo con compañías como Netflix y Disney en relación a mejores salarios y mayor protección contra la inteligencia artificial.
Sin embargo, la prórroga no logró ningún avance en las conversaciones, que finalizaron sin acuerdo el miércoles por la noche. El sindicato, que representa a aproximadamente 160,000 artistas, convocó a una huelga para la medianoche del jueves. Drescher, famosa por su papel en la serie de los años 90 "The Nanny", expresó su decepción: "Les dimos una extensión de buena fe, con la esperanza de que pudieran tomar medidas significativas y tener algo que discutir, pero nos engañaron. Perdieron tiempo cancelando nuestras reuniones y no se logró nada significativo".
Durante las dos semanas de prórroga, se llevaron a cabo importantes estrenos a nivel mundial, como "Barbie" de Warner, "Oppenheimer" de Universal y "Misión imposible: Sentencia mortal, parte 1" de Paramount. Sin embargo, las reglas de SAG-AFTRA impiden a los actores promocionar sus películas y programas durante una huelga. Esto significa que estrellas como Tom Cruise, Margot Robbie y Ryan Gosling tendrían que abstenerse de participar en los eventos en la alfombra roja, una herramienta importante utilizada por los estudios para obtener publicidad y, con suerte, mayores ingresos en taquilla.
Drescher señaló su sorpresa y admitió su ingenuidad en su primera gran negociación. Afirmó que creía que se podría llegar a un consenso y que los estudios podrían comprender cómo el nuevo modelo de negocio del streaming ha afectado drásticamente a toda la industria del entretenimiento.
Una de las principales preocupaciones de los actores se refiere a la reducción de los pagos por derechos de retransmisión (residuales). Las compañías de streaming se niegan a revelar las cifras de audiencia y pagan una tarifa plana por todos los programas disponibles en sus plataformas, lo que resulta en un retorno menor para los actores, incluso en casos de éxitos globales.
Drescher calificó esta situación como una locura y expresó su deseo de que los estudios se involucren de manera honorable y respetuosa para que los actores puedan adaptarse a estos cambios significativos.
A pesar de la frustración, Drescher enfatizó que la puerta de SAG-AFTRA sigue abierta para continuar las negociaciones y que la huelga no es el final, sino el siguiente paso. Sin embargo, la pelota está en manos de los estudios para retomar las conversaciones.