Hombre vive 56 años ENCERRADO para EVITAR contacto con mujeres: "Me aterrorizan"
Callitxe Nzamwita, un hombre de 72 años originario de Ruanda, tomó una decisión drástica en su adolescencia: Aislarse completamente de las mujeres. Desde los 16 años, ha vivido recluido en su hogar, protegiéndose de cualquier interacción con el sexo opuesto. Esta peculiar historia ha generado asombro y curiosidad, llevando a la luz una rara condición psicológica conocida como ginefobia.
Aislamiento extremo
A los 16 años, Callitxe Nzamwita decidió atrincherarse en su casa y levantar una cerca para asegurarse de que ninguna mujer pudiera acercarse a él.
"La razón por la que me encerré aquí dentro y tengo una cerca en mi casa es porque quiero asegurarme de que las mujeres no se acerquen a mí", confesó Callitxe Nzamwita en una entrevista con medios locales.
"No quiero mujeres a mi alrededor porque me aterrorizan", remarcó Callitxe Nzamwita, que al estar refugiado no tiene ingresos económicos y depende exclusivamente de la ayuda de sus vecinos.
Este aislamiento voluntario ha perdurado durante 56 años, sin que Callitxe Nzamwita haya tenido contacto significativo con ninguna mujer durante este tiempo.
Miedo incontrolable
Callitxe Nzamwita asegura que cualquier interacción con el sexo opuesto le genera una gran sensación de miedo, que en ocasiones se volvió incontrolable durante su adolescencia.
Este temor extremo, que ha definido gran parte de su vida, lo llevó a evitar cualquier situación que pudiera involucrar a mujeres, incluyendo relaciones íntimas y contactos sociales básicos.
Irónicamente, son sus vecinas las que se aseguran de que se alimente correctamente y tenga sus necesidades básicas cubiertas. Callitxe Nzamwita espera pacientemente a que sus vecinas se retiren de la propiedad para recoger los alimentos que le dejan.
¿Qué es la ginefobia?
Expertos sugieren que Callitxe Nzamwita podría padecer ginefobia, una condición psicológica caracterizada por un miedo irracional a las mujeres.
Aunque esta condición no está oficialmente clasificada como un trastorno mental en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, sus síntomas son reales y debilitantes.
Los afectados por ginefobia pueden experimentar ataques de pánico, opresión en el pecho, sudoración excesiva, palpitaciones rápidas y dificultad para respirar al ver o interactuar con mujeres.
La historia de Callitxe Nzamwita, quien ha vivido 56 años encerrado para evitar el contacto con mujeres, es un caso extremo de cómo el miedo puede dominar y definir una vida entera. Su relato nos invita a reflexionar sobre la importancia de la salud mental y la necesidad de un mayor apoyo y comprensión para aquellos que sufren en silencio.