Estados Unidos: Policía de Maine halla sin vida al pistolero que mató a más de 18 personas
Luego de cerca de una semana de búsqueda incansable, las fuerzas de la ley hallaron sin vida a Robert Card, el pistolero que mató a más de 18 personas en el centro de Maine, en Estados Unidos.
El cuerpo de Card fue encontrado cerca a una planta de reciclaje en la comunidad de Lisbon, con una herida de arma en la cabeza. Se presume que el asesino habría acabado con su vida al enterarse del operativo masivo en su búsqueda.
Card, de 40 años, tenía antecedentes de problemas mentales e incidentes con armas con anterioridad.
¿Quién era Robert Card?
El asesino fue un instructor de armas que recibió entrenamiento dentro del ejército estadounidense, dentro de una instalación en la ciudad de Saco, Maine, según pudo comprobar la policía estatal.
Sin embargo, un documento conseguido por la cadena CBS especificaba que Card era un reservista del Ejército de Estados Unidos, en una instalación en Saco. Por su lado, la Oficina del Sheriff del condado de Androscoggin divulgó fotos del sujeto, pidiendo ayuda para su identificación.
En este último documento se especificaba que Card habría reportado tener problemas mentales, donde indicaba 'escuchar voces'. En verano de 2023 pasó un tiempo dentro de un centro de rehabilitación, y había amenazado con disparar hacia la base de la Guardia Nacional en Saco.
Operación de captura masiva
La policía estatal de Maine estuvo a cargo de las labores de búsqueda del presunto autor de los ataques, siendo asistida por agentes federales del gobierno de Estados Unidos.
Múltiples agentes del FBI participaron en la operación masiva, que también tuvo como involucrados a 40 efectivos del Buró de Alcohol, Tabaco y Explosivos, además de personal de otras agencias públicas.
La cantidad de personas involucradas respondía a dos aspectos: el asesino podía seguir activo y la abundancia de zonas de bosque en los alrededores de Lewiston dificultaban la búsqueda del asesino.
Un episodio de violencia atroz
El incidente, ocurrido el pasado miércoles, fue de un carácter brutal. Según testimonio de las víctimas, el tiroteo inició alrededor de las siete de la tarde -hora local- en el Schemengees Bar & Grille, un restaurante ubicado en el centro de la ciudad. Posteriormente se extendió a la discoteca Sparetime Recreation, donde uno de los propietarios del local, Justin Joray, describió la escena de forma cruda.
"Fue un caos total, en el local habían entre 100 y 150 personas, incluso niños", señaló.
Billie Jayne, una residente de la ciudad, relató que el escenario de la ciudad era de 'verdadero terror'.
"Durante todo el viaje de vuelta a casa hubo sirenas, una tras otra. Helicópteros, sirenas, nunca había escuchado tanta actividad policial en mi vida en esta ciudad. Tenemos policías de todo el estado, de fuera del estado, acercándose", indicó.
El temor fue tal que los negocios de la ciudad cerraron sus puertas una vez se dio inicio a la alarma de seguridad, y recién reactivaron las actividades en la ciudad al paso de varias horas.
Sin embargo, Maine puede estar en paz, debido a que Robert Card, el pistolero que mató a más de 18 personas fue hallado sin vida.