10/12/2019 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 09/01/2023
Un alto funcionario del régimen de Corea del Norte respondió este lunes a las últimas advertencias lanzadas por el presidente estadounidense, Donald Trump, y subrayó que el país asiático no tiene “nada más que perder”.
Kim Yong-chol, que ha sido responsable de inteligencia del régimen y ha estado al frente del diálogo nuclear con Washington, rubricó este lunes un comunicado publicado por la agencia KCNA respondiendo a los comentarios realizados por Trump el fin de semana.
El sábado, después de que el embajador norcoreano ante la ONU, Kim Song, diera por roto el diálogo sobre desnuclearización, Trump explicó a los periodistas que Corea del Norte no debería tratar de interferir en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de noviembre próximo.
El domingo, Pyonyang anunció una “prueba importante” en un centro de desarrollo de misiles (probablemente testeó un nuevo motor para proyectiles, según mostraron fotos por satélite) y Trump, a través de la red social Twitter, advirtió al líder norcoreano, Kim Jong-un, de que perderá “todo” si actúa de manera “hostil”.
“Hay tantas cosas que Trump no sabe de Corea [del Norte]. Nosotros no tenemos nada más que perder”, dijo este lunes Kim Yong-chol en el citado comunicado.
“Presidente nervioso”
“Uno puede ver que Trump está muy nervioso”, añadió el funcionario norcoreano, que aseguró que “puede estar cerca el momento en que vayamos a tildarle de nuevo de 'anciano senil'”, en referencia al cruce de insultos entre el presidente estadounidense y el régimen allá por 2017, antes del acercamiento del año pasado.
Kim añadió que el régimen “no puede ocultar su decepción” y recordó que Pyonyang ha dado a Washington hasta fin de año para traer una nueva propuesta que desatasque el diálogo sobre desnuclearización.
Las negociaciones están bloqueadas desde la fracasada cumbre de Hanoi de febrero, donde Washington consideró insuficiente la oferta de Pyonyang referente al desmantelamiento de sus activos nucleares y se negó a levantar sanciones económicas.
Desde entonces Corea del Norte ha realizado 13 pruebas de misiles de corto alcance, además de la misteriosa prueba de este fin de semana, y ha ido incrementando paulatinamente la dureza de sus mensajes destinados a la Casa Blanca.