08/06/2023 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 08/06/2023
El gobierno de Gabriel Boric, perteneciente a la izquierda política, ha establecido una nueva política minera en Chile con el objetivo de obtener recursos para financiar sus programas sociales y ha despertado un interés especial en el futuro del litio, conocido como el "oro blanco", que es vital en la transición hacia las energías limpias.
En este sentido, Chile ha aumentado los impuestos a la explotación del cobre, del cual es el mayor productor mundial, y plantea que el Estado tenga un papel protagónico en la extracción del litio, del cual es el segundo productor global.
La nueva política minera, anunciada a fines de abril por Boric, establece un rol más relevante para el Estado. El plan contempla una alianza público-privada, donde el Estado estará presente en toda la cadena de producción a través de una futura Empresa Nacional del Litio. Actualmente, dos compañías privadas, SQM de Chile y Albemarle de Estados Unidos, extraen el litio del salar de Atacama, ubicado a 1.700 km al norte de Santiago, bajo concesiones que vencen en 2030 y 2043 respectivamente. Los términos de los próximos contratos aún no han sido definidos por el gobierno, pero ya ha habido manifestaciones de interés por parte de empresas e inversionistas internacionales.
El interés en el litio se debe a su creciente demanda, lo que ha provocado un aumento del 400% en su precio durante 2022. Las exportaciones chilenas de litio pasaron de 1.233 millones de dólares en 2021 a 8.093 millones en 2022, según datos del Banco Central. El litio representó el 3% del PIB chileno el año pasado y fue el segundo producto que más contribuyó a la economía después del cobre.
Aunque la estrategia del gobierno no busca la nacionalización, ha generado cautela debido a su concepción ideológica, lo cual podría afectar la toma de decisiones pragmáticas en este ámbito, según el analista Guajardo.
En cuanto al cobre, Boric logró la aprobación de un incremento en el impuesto específico a la gran minería para recaudar casi 1.500 millones de dólares. Esto se hizo necesario después de que fracasara en el Congreso su plan de hacer que los ricos pagaran más impuestos. Desde la nacionalización de las grandes minas de cobre en 1971, la extracción y exportación de este metal ha sido considerada como el sustento económico de Chile. Con una producción anual de 5,3 millones de toneladas en 2022, lo que representa el 26% de la oferta mundial, Chile es el principal productor mundial de cobre.
El sector privado ha expresado su preocupación por la nueva carga tributaria, ya que estima que la carga tributaria efectiva para las grandes empresas mineras será del 44,7%, lo que es superior a la de competidores directos como Canadá, Perú, Australia y Estados Unidos. Esto podría resultar en una pérdida de competitividad para la industria minera chilena y afectar la materialización de inversiones en proyectos que superan los 50.000 millones de dólares, según Joaquín Villarino, presidente del Consejo Minero.