25/04/2021 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 09/01/2023
Un abril trágico están viviendo las personas en Brasil al conocerse que ya superaron las 390,000 muertes por COVID-19. Lo peor es que solo el 6% de su población ha recibido doble dosis de vacuna.
Mientras miles de familias lloran a sus muertos, el presidente Jair Bolsonaro se enfrentó a las regiones que buscan frenar la pandemia y ha amenazado con sacar a las Fuerzas Armadas, si se “generan caos”, ante los reclamos de los negacionistas como él que no aceptan el cierre de lugares públicos como iglesias.
El Ministerio de Salud informó que se tienen registrados hasta ayer 390,797 fallecidos por el patógeno. Con estos números, el gigante latinoamericano se mantiene como el segundo país con mayor número de muertes en el mundo, solo debajo de Estados Unidos (572,000 fallecidos) y seguido por la India (192,000 fallecidos).
Brasil confirmó 32,572 nuevas infecciones en las últimas 24 horas. Con ello, el total de contagiados ascendió a 14'340,787, pese a que las cifras podrían ser mayores debido a la reducción de personas responsable de recopilar datos los fines de semana.
De otro lado, Bolsonaro en una entrevista con TV Crítica, indicó que convocará al Ejército para “restablecer el artículo 5 de la Constitución”, el cual se refiere a las libertades individuales de los ciudadanos, entre las que se incluyen libertad de circulación y de culto.
Además, afirmó que estas medidas son contrarias a la Carta Magna del país sudamericano. Sin embargo, el Tribunal Supremo Federal aprobó, desde abril del 2020, que los gobiernos locales adopten medidas restrictivas durante la pandemia. Con más de 210 millones de habitantes, Brasil confía en el avance de la vacunación, la cual va a ritmo lento.
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◼ La crisis de abril
Este es el peor mes en cuanto a letalidad desde que inició la pandemia. Brasil lamenta 69,282 nuevas víctimas en abril, frente a los 66,573 fallecidos registrados durante marzo. Se registró casi 20,000 fallecidos en la semana del 16 al 22 de abril, con lo que encabezó la lista mundial de muertes durante esos siete días.