Bombardeos rusos en Kiev durante visita de mandatarios africanos
Rusia llevó a cabo ataques aéreos sobre Kiev el viernes mientras se encontraban de visita líderes africanos que buscaban una mediación para la paz, y afirmó que la contraofensiva ucraniana en el sur del país estaba destinada al fracaso.
Entre los líderes africanos presentes se encontraban el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, quien se reunió el viernes con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, y tienen previsto encontrarse el sábado en San Petersburgo con el presidente ruso, Vladimir Putin.
"Debe haber una reducción de la tensión por ambas partes", declaró Ramaphosa en una conferencia de prensa junto a Zelenski.
Además del presidente sudafricano, también estuvieron presentes el presidente de Senegal, Macky Sall; el de Zambia, Hakainde Hichilema; y representantes de la República Democrática del Congo, Uganda y Egipto.
La Fuerza Aérea Ucraniana informó que derribó doce misiles rusos, incluyendo seis misiles supersónicos Kinzhal, que fueron interceptados cerca de Kiev.
"Los misiles rusos son un mensaje para África: Rusia busca más guerra, no paz", reaccionó el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, en Twitter.
Peter Stano, portavoz del jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, señaló que los líderes africanos fueron recibidos "de una manera muy especial con nuevos ataques de misiles".
La visita de la delegación africana se produce en medio de la contraofensiva de las fuerzas ucranianas para intentar recuperar los territorios conquistados por Rusia desde el inicio de la invasión en febrero de 2022.
"Las fuerzas armadas ucranianas no tienen posibilidad alguna allí ni en ninguna otra zona", afirmó Putin en un foro económico en San Petersburgo.
El ejército ruso reconoció que se estaban librando intensos combates en el sur de Ucrania por el control de las localidades de Rivnopil y Urojaine.
Las fuerzas ucranianas "utilizaron sus supuestas respuestas estratégicas para romper las defensas [rusas], consolidar las suyas y avanzar. No lograron ninguno de estos objetivos", insistió Putin.
Putin también confirmó que Rusia había comenzado a transferir armas nucleares a Bielorrusia, un país aliado, como anunció en marzo.
"Las primeras ojivas nucleares han sido transferidas al territorio bielorruso. Son solo las primeras, pero antes de que termine el verano, completaremos el proceso", afirmó.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, indicó que los bombardeos en la capital no causaron daños.
Sin embargo, la policía regional informó que siete personas, incluidos dos niños, resultaron heridas por fragmentos de misiles en una localidad de la región.
La delegación africana también visitó Bucha, en las afueras de la capital, escenario el año pasado de una masacre de civiles atribuida al ejército ruso.
La mediación africana es la última iniciativa en una serie de esfuerzos diplomáticos que hasta ahora no han tenido éxito en la resolución del conflicto.
Sin embargo, según los expertos, tiene pocas posibilidades de prosperar.
Sudáfrica, criticada por su postura cercana a Moscú, se ha negado a condenar la invasión rusa y afirma que desea mantenerse neutral e impulsar el diálogo.
Los países africanos han denunciado de manera menos unánime que las potencias occidentales la invasión rusa.
Putin intenta atraer a los líderes africanos argumentando que Rusia está luchando contra el imperialismo occidental y acusa a los aliados de Ucrania de bloquear las exportaciones de cereales y fertilizantes rusos, que son vitales para África.
"El sistema internacional neocolonial ha dejado de existir y el mundo multipolar, por el contrario, se fortalece", afirmó Putin.