Ataques con explosivos crecen en México, seis muertos deja el más reciente
Un ataque con explosivos contra una patrulla policial en el estado de Jalisco, México, dejó seis muertos y 12 heridos. Según expertos, esta práctica inusual está siendo utilizada por los cárteles del narcotráfico para aterrorizar a las fuerzas de seguridad.
El incidente ocurrió en Tlajomulco, en las afueras de la ciudad de Guadalajara. Tres policías se encuentran entre las víctimas mortales, y aún no se ha informado sobre la identidad de las otras tres personas fallecidas. Además, 12 personas resultaron heridas.
Jalisco es uno de los estados más afectados por la violencia del narcotráfico en México, con un alto número de homicidios y desaparecidos. Según cifras oficiales, entre enero y junio del año pasado hubo 1.095 homicidios y aproximadamente 750 personas desaparecidas.
El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, calificó el ataque como un "acto de terror brutal" y lo atribuyó a la delincuencia organizada. La región es conocida por ser la base del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), uno de los cárteles más poderosos que opera en varios países.
Según Gerardo Rodríguez, investigador de la Universidad de las Américas Puebla, estos ataques con explosivos son estrategias de extrema violencia utilizadas por los cárteles para intimidar a las autoridades y a la población.
Sin embargo, ha surgido controversia en torno a la versión oficial del incidente. Según una de las organizaciones que busca a personas desaparecidas, la llamada anónima reportada en la versión oficial nunca fue recibida por ellos, y señalan que están en constante comunicación. Jalisco es uno de los estados con más desaparecidos en México.
Los ataques con bombas son poco comunes en México, pero en los últimos meses se han registrado en varias zonas, como Michoacán, Guanajuato y Jalisco. Las autoridades responsabilizan al CJNG por estos atentados. El objetivo de estos ataques es debilitar a los cárteles rivales y a las fuerzas de seguridad, además de infundir terror en la población civil.
El presidente Andrés Manuel López Obrador rechaza la propuesta de clasificar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, argumentando que esto podría llevar a una intervención militar extranjera en el país. López Obrador defiende su enfoque de seguridad basado en medidas no coercitivas y enfatiza la importancia de la justicia para lograr la paz.
Desde que se implementó la ofensiva militar antidrogas en 2006, México ha sufrido alrededor de 350,000 asesinatos, en su mayoría atribuidos a los cárteles del narcotráfico.