Tragedia en Arequipa: 15 muertos y 22 heridos por imprudencia de conductores en menos de tres días
Una tragedia ha sacudido a la ciudad de Arequipa, donde en menos de tres días se han registrado numerosos accidentes de tránsito que han dejado un saldo desolador. La imprudencia de los conductores ha cobrado la vida de 15 personas y ha dejado a otras 22 heridas. Estos incidentes han puesto de manifiesto la necesidad de tomar medidas urgentes para promover una conducción responsable y mejorar la seguridad vial en la región.
Fatídicos accidentes
En menos de tres días, una serie de accidentes de tránsito, causados por la imprudencia de los conductores, ha dejado un saldo devastador. El primero de estos incidentes ocurrió en el kilómetro 172 de la carretera Arequipa-Puno, cerca de Imata. Allí, un conductor invadió un carril y chocó de frente con un trailer, cobrando la vida de los cinco ocupantes del automóvil.
Otro accidente tuvo lugar en el distrito de Orcopampa, en la provincia de Castilla, cuando un furgón, aparentemente a exceso de velocidad, volcó y cayó a un abismo de 35 metros, dejando cuatro fallecidos y once heridos.
Sin embargo, el accidente que ha causado mayor conmoción ocurrió el pasado lunes. Una minivan, que transitaba por la ruta Espinar-Arequipa, cayó a una quebrada en el kilómetro 17 de la vía Arequipa-Yura, resultando en seis muertos y once heridos, quienes milagrosamente sobrevivieron.
Según testigos y pasajeros, el conductor de la minivan, identificado como Luis Orlando Huachaca Sivincha, intentó adelantar a otro vehículo invadiendo el carril contrario, y al encontrarse con un camión, realizó una maniobra incorrecta que provocó el trágico accidente, lanzando a los 15 pasajeros fuera del vehículo.
Víctimas de la imprudencia
Entre las víctimas de esta fatal tragedia se encuentra René Arcalla Huamaní, un joven de 22 años que se dirigía desde Chumbivilcas, Cusco, a Arequipa para estudiar maquinaria pesada.
Lamentablemente, la adversidad no terminó para la familia de René Arcalla Huamaní, ya que los 4 mil soles que llevaba consigo, producto de la venta del ganado de sus padres para costear sus estudios, desaparecieron misteriosamente, según denunció su hermano, Sergio Arcalla Huamaní.
Otro de los afectados fue Edgar Chilo Mogrovejo, un trabajador de la mina que deja atrás a una viuda y un hijo de 10 años. El padre de familia viajaba junto a su hermano menor, José, para brindarle apoyo en unos trámites laborales, pero ambos fueron sorprendidos por la desgracia, uno murió y el otro quedó gravemente herido.
Alberto Chilo Fernández, padre de Edgar, atribuye los constantes accidentes al exceso de velocidad de las minivan y a las estrechas y peligrosas carreteras. Insta a las autoridades, como la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran), la Policía Nacional y la Gerencia Regional de Transportes, a realizar una mayor fiscalización.
Los sobrevivientes de este accidente consideran su supervivencia como un milagro. Sin embargo, el exceso de velocidad imprudente por parte de los conductores de las minivan continuará cobrando víctimas en las carreteras de Arequipa si no se intensifica la fiscalización de las más de mil minivan que brindan servicios interprovinciales, muchas de las cuales utilizan incorrectamente los permisos turísticos para cubrir rutas interprovinciales.
Accidentes en 2023
En lo que va del año, se han registrado 58 accidentes de tránsito en las vías de la región, cobrando la vida de 85 personas y dejando 62 heridos, cifras alarmantes que evidencian la peligrosidad de las carreteras, según las estadísticas de la Unidad de Prevención e Investigación de Accidentes de Tránsito.
Problemas como la falta de señalización, la ausencia de semáforos y el mal estado de las vías también pueden contribuir a los accidentes. Sin embargo, no solo la falta de infraestructura es determinante, sino también el factor humano, es decir, la responsabilidad de los conductores que no consideran las consecuencias de exceder los límites de velocidad o invadir carriles contrarios para llegar más rápido a su destino. A menos que se tome conciencia al respecto, las carreteras seguirán teñidas de sangre.