27/06/2021 / Exitosa Noticias / Exitosa perú / Actualizado al 09/01/2023
Una joven de 28 años, a quien llamaremos Mercedes, denuncia que dos policías de la comisaría de Tacalá, distrito de Castillo (Piura), abusaron sexualmente de ella dentro de un patrullero, tras una intervención policial.
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De acuerdo a la denuncia interpuesta por la agraviada, el hecho ocurrió el domingo 20 de junio a las 23:45 horas, en circunstancias en que la joven iba a bordo de una motocicleta junto a su hermano y un amigo. El vehículo fue intervenido por un patrullero de la comisaría de Tacalá en el asentamiento humano Almirante Grau, distrito de Castilla.
La joven cuenta a - 'Exitosa Perú' - que solo portaba su pase laboral, mientras que sus acompañantes, quienes no contaban con el permiso de circulación, accedieron a pagar una 'coima' para no ser trasladados a la dependencia policial.
Mercedes narra que, tras la intervención, los policías le ofrecieron llevarla a su casa, ubicada en la urbanización El Bosque. Su hermano quiso acompañarla, pero no le dejaron, por lo que decidió subir a la motocicleta para guiar al patrullero.
La agraviada, confiada en que la llevaban a su vivienda, se asustó cuando se percató que la patrulla se había desviado del camino y se encontraba en la rivera del canal Biaggio Arbulú. En el lugar, según cuenta, ambos agentes abusaron sexualmente de ella en el interior del vehículo.
“Intenté tirarme desde la camioneta, pero iba con tacos. Miré hacia atrás, todo estaba descampado y me entró el temor (...) Les dije que no me hicieran nada y ellos me decían: 'no, pero tú tienes que apoyar a tu hermano', me daban a entender que se lo iban a llevar a la comisaría (...) Prácticamente, me amenazaron”, narró.
Luego de cometer la agresión sexual, los agentes la llevaron a su casa en donde la esperaban sus familiares, quienes les increparon por la demora a lo que los policías justificaron la tardanza por un 'improvisto'.
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Los familiares de Mercedes, al enterarse del suceso, interpusieron una denuncia el lunes 21 de junio; sin embargo, esta no fue aceptada. Al día siguiente insistieron, pero volvieron a ser ignorados, por lo que se vieron en la obligación de exponer el caso a los medios de comunicación.
A pesar de que el personal de la Comisaría de Tacalá se negaba a revelar los nombres de los policías acusados, la familia de la víctima logró obtenerlos. Se trataría de los agentes Georg Robles Fernández y Ángel Chinchay Becerra, quienes, pese a la denuncia, continúan trabajando en la mencionada dependencia policial.
Según el parte el policial, las relaciones sexuales se habrían realizado por mutuo acuerdo, pues la víctima indicó que, luego de incansables súplicas que fueron ignoradas, accedió por 'temor'.
Los familiares de Mercedes acusan a la Policía de encubrir y obstruir la investigación. Por ello, realizan constantes plantones en el frontis del complejo policial para exigir justicia.
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