Áncash: Instalan cerco que bloquea el ingreso a un colegio de Macate
Docentes y padres de familia del centro educativo N 88063 “Javier Pérez de Cuellar”, ubicado en el caserío Quihuay, en el distrito de Macate, en la región Áncash, se encuentran preocupados ya que un poblador ha colocado un cerco en la puerta del plantel, lo cual perjudica el ingreso de 90 alumnos de nivel primario y secundario.
El hecho se produjo desde hace dos semanas, cuando Javier Castillo Pérez, dueño de la parcela colindante, con palos y cañas de guayaquil levantó el cerco.
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El director del colegio, Marcodeo Carrasco Rojas, informó que ha realizado la denuncia en la comisaria de Macate y ha mandado documentación a la UGEL- Santa para que tomen cartas en el asunto, pues ante un sismo habría complicaciones para la evacuación.
“Tenemos miedo que ocurra un sismo o desastre natural, ya que ni los alumnos ni docentes podrían evacuar pacíficamente y ello, conllevaría un accidente. Es la única puerta que tiene el colegio. Anteriormente se ha tenido un dialogo con el propietario y propuso vender 40 metros cuadrados a S/180 soles, pero luego de varios días, su monto es subió a 25 mil soles, lo cual es una suma exorbitante para el colegio”, acotó Carrasco Rojas.
Asimismo, mencionó que presentó la documentación a Defensoría del Pueblo para que solucione el percance con el poblador.
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DATO:
Un hecho parecido ocurrió en junio, cuando el Ministerio de Salud (Minsa), mediante una orden judicial, tomó posesión del terreno donde operaba la Institución Educativa de Educación Inicial Virgen del Carmen, en la zona de San Hilarión, en el distrito de San Juan de Lurigancho (SJL), perjudicando a 340 niños que estudiaban en este local.
El desalojo se produjo por personal de la Policía Nacional y otros encargados, quienes realizaron un forado y procedieron con la soldadura de la puerta, quedando la directora del colegio al interior sin poder salir.
“Tenemos que cuidar porque hace un momento se han llevado los parlantes de nuestros hijos, es muy injusto que la directora no nos diga que tiene problemas el colegio para que nosotros podamos estar al pendiente.
No sé cómo vamos a hacer ahora, estamos a mediados de año y ellos tienen que ir a estudiar”, declaró una madre de familia a Latina.
La indignación que generó este hecho en los padres de familia fue aún mayor cuando los juegos didácticos, materiales de limpieza y otros implementos de uso educativo de la institución educativa fueron arrojados a la calle.
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