Giacomo Bocchio: Conoce el sueño frustrado del chef tacneño que dejó por complicadas operaciones
Giacomo Bocchio se ha convertido en uno de los íconos de 'El Gran Chef Famosos' debido a sus conocimientos en gastronomía. En esta ocasión, el tacneño se sinceró y contó un sueño que tuvo que dejar por operaciones que le tuvieron que realizar.
La tuvo clara
A los 17 años, Giacomo Bocchio ya tenía claro lo que quería ejercer durante toda su vida. El jurado y cocinero de 'El Gran Chef Famosos' comentó sobre sus inicios en la cocina con la finalidad de compartir experiencia con los jóvenes amantes de la gastronomía.
Mediante una conversación con un medio local, el tacneño confesó que de niño quiso ser ginecólogo, luego en el colegio le gustó el fútbol y destacó en atletismo. Cabe resaltar que a los 16 años representó a nuestro país en el Mundial de Hungría en 100 metros planos.
"Desde chico soy una persona de tener convicciones muy claras, de saber hacia dónde voy, y tenía claro que quería ser cocinero; pero no fue sencillo porque mis papás no querían que sea cocinero, tenían sus dudas [...] Pensaban que tal vez estaba haciéndolo porque era una carrera más fácil en ese momento", dijo para el diario Ojo,
Para demostrarle a sus progenitores que su decisión de ser cocinero era seria, se tatuó un cuchillo en el brazo izquierdo a los 25 años, esto tras ser practicante en un conocido restaurante.
"A los 18 años, tomé la decisión categórica de decirle a mis papás que quiero ser cocinero, que quiero vivir de ser cocinero [...] Me lo hice (tatuaje) porque estaba en un momento de mi vida, a portas de abrir 'Manifiesto' y era un compromiso conmigo mismo con mi oficio", agregó.
Sueño frustrado
Durante su permanencia en la competencia culinaria de Latina, el chef ha sabido impartir sus conocimientos y demostrar mucha amabilidad a la hora de enseñar. Sin embargo, él también tiene un sueño pendiente por cumplir y que no está ligado a la cocina.
Al empezar una carrera tan joven, Giacomo tuvo que dejar muchas cosas atrás, no obstante y según sostuvo, él pudo ver en el fútbol una pasión a la cual pudo dedicarle disciplina, pero no fue así.
"La decisión más dura que he tomado a mis 23 años, que me hizo madurar de alguna manera, fue dejar de jugar fútbol. Tengo tres cirugías a la rodilla derecha. Si juego fútbol, tengo posibilidades de ya no poder moverme bien en una cocina, porque estoy fregado, pero todavía estoy bien", confesó.
A pesar de no tener problemas en la rodilla actualmente, el jurado mencionó que si vuelve a practicar este deporte es muy probable que sus complicaciones de salud retornen y afecte su vida profesional actual.
De esta manera, Giacomo Bocchio confesó que tiene un sueño frustrado: ser jugador de fútbol, el cual no pudo cumplir por las 3 operaciones complicadas que tuvo en su rodilla derecha.