'Supercentenario' de 119 años cobra Pensión 65

Muy pocos lo creen, pero don Marcelino Abad Tolentino tiene 119 años, es decir, nació en 1900, justo con el siglo XX, tiene miles de historias que contar y recibió por primera vez la subvención que da el Estado por ser usuario del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social - Midis, Programa Pensión 65.

'Don Marce', como le llaman, mide un metro 30 centímetros, no sabe leer ni escribir, nunca se casó y mucho menos tuvo hijos y vive en un paraje perdido del distrito de Changlla, en la provincia de Pachitea, en Huánuco.

Él se alimenta de lo que le brinda la naturaleza y aunque para muchos tiene grandes necesidades, para él su vida es generosa. Su sorpresa fue grande al recibir los 250 soles, que otorga dicho programa, pero no conocía los billetes de 50 soles, admitió que nunca había tenido en sus manos uno de ellos, por eso debieron cambiarlo por billetes de 10 soles.

Tal vez el más sorprendido fue el doctor Martín Díaz quien admitió que es la primera vez que ausculta a una persona de esa edad y que goza de buena salud, pese a lo avanzado de su edad. Por eso no le quedó más que llamarlo 'Supercentenario'.

El acto de entrega de su pensión, la primera que recibe en su larga vida, fue en el marco de una fiesta, porque no siempre una persona de esa edad recibe tal reconocimiento. En el acto participaron la alcaldesa de Chaglla, Mercedes Tolentino; la jefa de la Unidad Territorial de Pensión 65 en Huánuco, Genoveva Janampa, así como representantes del Gobierno Regional de Huánuco, de Essalud-Pasco, de la Municipalidad Provincial de Panao y de la Municipalidad de Pachitea.

A 'don Marce' también lo conocen como 'Mashito', no sabe de familiares ni propiedades y no ambiciona riquezas, solo quiere “dos pilas, un hacha, papas y arroz. Eso me traes”, dice sonriendo quien sería el hombre más longevo del país y quizá del continente.

Su vida transcurrió llena de carencias y necesidades. No tenía partida de nacimiento, tampoco DNI; nunca votó y no fue al colegio. No tuvo un empleo formal, un salario, ni una vivienda digna. En esas condiciones transcurrió toda su larga vida hasta el 7 de febrero pasado en que se supo de su paradero. Un adulto mayor, usuario de pensión 65, dio la voz de alerta.

Comunidad de longevos

La comunidad de Chaglla, a fin de velar por sus habitantes longevos, ha conformado una red de voluntariado compuesto por jóvenes, quienes atenderán a los adultos mayores del distrito, especialmente al señor Marcelino. Asimismo, para asegurar que cobre su pensión, Alcides Mendoza fue nombrado como su albacea, a fin de trasladarlo desde su vivienda hasta el punto de pago. Dicen que el secreto de la longevidad es compartido por Estefa Bravo Malpartida, de 107 años de edad, otra centenaria que vive en Chaglla y es usuaria de Pensión 65 desde el 2012, quien también recibió su pensión.