Se oponen a la bicameralidad porque el Congreso cuesta S/ 1,680 millones
Por: Dennis Falvy
Hay quienes creen que con la numerología se demuestra todo. Los números no engañan, era en el pasado una frase de clisé. Y como hay aparentemente en el mundo más gente que no tiene habilidades en matemáticas, por su complejidad, eso era admitido como dogma.
Recientemente se ha usado una frase que engloba a toda la población mundial para que impacte, en el sentido de que para alimentar 7,000 millones de humanos se sacrifica 70,000 millones de animales. Lo que se advierte produce problemas con el denominado “calentamiento global” y ya hay avances en crear nuggets de pollo a partir de las células madres del animal sin sacrificarlo. Es lógico deducir que no todo el mundo se alimenta de animales y menos que se pueda sacar un promedio aritmético, cierto, pero el número impacta.
Una ecuación se define como una igualdad entre dos expresiones, las que pueden contener una o más variables. Así, por ejemplo, es indubitable que 5 minutos es igual a 300 segundos. A ambos términos se les puede descomponer (factorizar) y la igualdad sigue siendo la misma.
Pero si una parte de la ecuación son 5 minutos de lo que más te gusta hacer, como comer tu plato de comida favorito y en la otra parte son 300 segundos en que sufres un asalto a mano armada de los demonios, vaya que la igualdad numérica pierde sentido. Esto pasa recurrentemente en los medios de comunicación, que usan el número sin análisis y no sé si a propósito o porque no lo manejan. Nos malinforman.
Por ejemplo, le quieren poner candado a la bicameralidad porque el Congreso actual presupuesta menos del 1% del proyectado para el 2019. Ojo que el 1% es S/ 1,680 millones, una enormidad, y el actual está superpoblado con 4,000 o más trabajadores.
En rigor, el porcentaje representa una cierta cantidad con respecto a 100. Si en lugar de tomar como referencia 100, se toma la unidad 1, se llama tanto por uno. Si t es un tanto por ciento, t/100 es el tanto por uno correspondiente. Eso es aritmética simple.
Si de cada 100 unidades se consideran 40, de una unidad se considerará 40/100 = 0.40. Si el precio de un televisor de primera calidad es de S/ 3,000 y te dan el 15% de descuento si lo pagas al contado, matemáticamente se calcula el descuento así: 15x 3,000/100 = 450. El precio en efectivo es entonces S/ 2,550. Se puede incluso ir directo y colocar 85% x 3,000/100 = S/ 2,550. Pero el porcentaje solo es peligrosísimo y para ello en matemáticas hay una distinción entre condición necesaria y suficiente, que es complicada de entender; pues se centra en lógica.
Más complejo
Muchos piensan que si es cierto A entonces es cierto B. Un ejemplo para fijar esto, se señala, es que si llueve, entonces en mi garaje que carece de techo aparece mojado, mi auto incluido. Esto es A para mí. B es entonces que ha llovido.
Pero ojo, A puede estar mojado porque lavé mi auto con una manguera; por lo que deducir que si no llueve, mi carro y el suelo de mi garaje no se mojan es falso. La cosa es más compleja, pero me permite señalar que una condición suficiente para que mi auto se moje es que llueva, pero no es una condición necesaria, pues puedo echarle agua con una manguera.
Esta confusión se da a distintos niveles de la población. Así que entonces señalemos varios escenarios. Si un negocio produce 100% de ganancia mensual y otro 10% en el mismo periodo; decir que uno es 90% más rentable no es necesariamente cierto. Ese 100% puede ser el negocio de un ambulante que vende caramelos y 10% el negocio de utilidad de una fábrica de cerveza de gran tamaño productivo.
En otro caso. Un PBI es de 5% y otro del 1%, ello no quiere decir que un país es 400% más que el otro. Piénsese el Perú y Estados Unidos, el tamaño importa. Otro ejemplo, si un señor ha subido día a día un 10% de su peso, para muchos esto es grave. Pero ¿qué pasa si es un náufrago rescatado luego de meses y el lapso de la suba es de solo unos días de recuperación?
Por ello, eso de comparar el gasto del Congreso que es menos del 1% con el presupuesto total, vaya que es una falacia. Los números sin contexto engañan y de eso abusan la TV, las encuestas, los políticos y opinólogos.