OPINIÓN | Miguel Humberto Aguirre: "Despertador diferente"
Aparecieron las iluminaciones en el cielo de Lima. También sonaron grandes impactos. El despertar fue diferente.
Diferente para quienes hacen uso de las redes. Entraron, de inmediato, en acción recomendando no hacer uso de los celulares. Mucho cuidado paras aquellos ya, con destino a sus trabajos. Lo calificaron de peligroso.
No faltó quien los califico de tremendistas. Sensacionalistas. De escandalosos.
Hace un tiempo. Una publicación, de la BBC, contó la historia de una joven que, en un parque de Londres, recibió una descarga, cuando hablaba por su “móvil”.
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Esa niña nunca recordó los hechos. Sufrió un paro cardiaco y, hoy, es trasladada en silla de ruedas con limitaciones físicas y cerebrales. Voló su oído. Su aparato celular, terminó totalmente destrozado.
En Malasia, China o Corea del Sur, en situaciones similares, sus actores terminaron sin vida.
Lo escuchado y registrado en Lima fue algo muy curioso. Muy raro. Anormal.
Ocurre, según los estudiosos, muy a lo lejos. Para Lima, el anterior suceso similar, habría ocurrido hace 50 años. Los rayos que iluminaron, la noche y madrugada de la capital, y también Pisco, son un fenómeno natural de una descarga electrostática de gran intensidad ocurrida en la atmósfera. El choque produce calor y luz al aire cercano. Se extiende y, el resultado, es el fuerte sonido en el aire, conocido como estruendo.
Fue una mañana, de comienzo de semana muy diferente. Inesperada y preocupante para muchos, sobre todo los pueblos jóvenes de las laderas donde, el peligro, se vive directamente. No necesitan leerlo. Valorable la reacción de las redes. Para felicitarlos.
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