OPINIÓN | Jorge G. Solís: Retiro de AFP y CTS: pan para hoy y miseria para mañana

Pan para hoy miseria para mañana, esta es la frase que usó el ministro de Hacienda de Chile, cuando se discutía el segundo retiro del 10% de la AFP, en abril del 2020; entonces señalo: “que el retiro es una mala idea porque es desvestir un santo para vestir otro, a tener plata hoy, pero renunciar a tener pensiones mañana, sabiendo que tenemos un problema fundamental”.

Nada más cierto que el antiguo refrán, repetido casi como una letanía en distintos escenarios políticos y en coyunturas críticas económicas, frente a decisiones erráticas y populistas que pretenden paliar el presente, sacrificando el futuro.

El sexto retiro de los fondos de la AFP aprobado por el Congreso, según Phase Consultores significará una salida de S/.37,750 millones, lo que presionará la inflación en 4.5 puntos adicionales, habida cuenta que la mayor liquidez impactará en la demanda además, tras la noticia la bolsa limeña cayó 6.2% por temor al impacto de nuevos retiros de AFP, expertos estiman que seguirá golpeando a la BVL.

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Una nueva liberación de fondos implica la venta de parte del portafolio en acciones locales sin cubrir la salida de recursos, con incidencia en los papeles del gobierno por ser los activos de mayor liquidez. Como si fuera poco, el drama es que siete millones de afiliados quedarían sin nada en su fondo de retiro, el Ministerio de Economía estima que de los 8.4 millones de afiliados al SPP, 2.3 millones se quedaron sin un sol en sus cuentas de ahorro previsional, mientras que 4 millones tienen menos de una UIT (S/4,600), es decir no tendrán pensión.

Lo absurdo de la medida es que beneficia a un grupo de personas, que cuentan con trabajo formal, viven de un sueldo, gozan de todos los beneficios laborales; sin embargo, cerca del 90% de la población económicamente activa que no se encuentra empleada o en el mejor de los casos subempleada (trabajadores informales o por cuenta propia) sector más vulnerable que no recibirá un solo sol, ¿entonces cuál es la lógica?), si el lev motive de la norma es ayudar a los más pobres. Pareciera que se busca socializar la pobreza, que los afiliados de hoy que podrían gozar de una pensión mañana, que les permita sustentar sus necesidades de la vejez, terminen en la miseria.

Termino esta nota con el aforismo “NO ES POSIBLE UNA SOCIEDAD DE BIENESTAR SIN PROTECCIÓN SOCIAL”. Las naciones no son más prósperas en la medida de la riqueza que atesore el Estado, sino para decirlo coloquialmente, cuanta plata tiene la gente en el bolsillo; en buen romance, trabajo pleno, salario digno, salud y educación de calidad, capacidad de ahorro y protección social.

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