05/07/2019 / Exitosa Noticias / Edic. impresa / Actualizado al 09/01/2023
Después de semanas de enfrentamientos entre las comunidades nativas y los representantes de la empresa Petroperú, por fin un equipo de fiscales pudieron ingresar a la zona afectada para verificar el daño causado por el derrame de petróleo y permitir que se pueda iniciar el trabajo de limpieza que daña el ecosistema.
El 18 de junio, se reportó un derrame de petróleo a la altura del kilómetro 237, en la comunidad nativa Nuevo Progreso. Las zonas afectadas se encuentran en la quebrada Numpatkaim en el distrito de Manseriche, provincia de Datem del Marañón, región Loreto.
Es hasta esta zona que la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental de Loreto llegó para verificar la afectación causada por el crudo. Durante la diligencia se tomaron muestras para evaluar el impacto que se está generando en el ecosistema.
Si bien durante varios días se registró enfrentamientos para que cuadrillas de trabajadores de Petroperú ingresen a la zona afectada, esta vez se logró luego de las coordinaciones con las autoridades de la Comunidad Nativa Nuevo Progreso-Saramiriza. La Fiscalía indicó que las comunidades de Jerusalén y Nueva Alianza garantizaron la entrada de las autoridades al kilómetro 237 del ramal norte del Oleoducto Norperuano, lugar donde se originó el derrame de crudo.
Esta diligencia de constatación técnico fiscal, estuvo a cargo del magistrado Yusén Caraza Atoche, e integrada por los peritos del Equipo Forense en Material Ambiental del Ministerio Público (EFOMA).
Emergencia
Según da cuenta el Ministerio Público, esta acción permitió verificar los alcances de la emergencia, que abarca la quebrada Numpatkaim, recursos naturales no renovables, biodiversidad y otros, que se han visto impactados negativamente después de 15 días de ocurrido el derrame de crudo de petróleo; poniendo en riesgo la salud ambiental de las poblaciones de las áreas cercanas.
El equipo de trabajo del Ministerio Público destacó los cinco días de acciones desplegados, que contemplaron diversas reuniones con autoridades locales y el acercamiento a las comunidades afectadas, que conllevó al logro de la suscripción del acta con los apus de las comunidades de Jerusalén y Nueva Alianza, que permitió contar con todas las garantías para esta diligencia realizada ayer, tras varios intentos fallidos de negociación por parte de otras instituciones.
IDENTIFICARÁN CAUSAS
El Ministerio Público realizará una nueva diligencia que permita identificar las causas del hecho, por lo que permitirá averiguar si fue un boicot o por mal mantenimiento de la red como denuncian las comunidades nativas. Asimismo, se dispuso la continuación del plan de contingencia y recuperación de crudo interrumpido por el conflicto socioambiental, lo que permitirá la activación del plan de remediación efectiva del área de influencia directa e indirecta de acuerdo a los protocolos que establece la norma. Se espera que Petroperú de inicio a las labores de mantenimiento.