Muestran imagen de daño causado por derrame en Saramiriza
Después de denuncias de vandalismo, tensiones y negativas, personal del Ministerio Público ingresó ayer a la zona afectada por el derrame de petróleo en la comunidad de Nuevo Progreso-Saramiriza, provincia de Datem del Marañón (Loreto). El objetivo de la evaluación es determinar el alcance del daño causado.
En un comunicado, la institución informó que el pasado lunes 1 de julio los apus de las comunidades de Jerusalén y Nueva Alianza se comprometieron a dar todas las garantías para el arribo del personal especializado al lugar donde ocurrió el incidente, a la altura del kilómetro 237 del Oleoducto Norperuano.
Así, programaron la entrada del personal de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental de Loreto para ayer miércoles 3 de julio. Un día antes, el fiscal Yusén Caraza, acompañado de forenses en Materia Ambiental (EFOMA) y la Unidad de Monitoreo Georeferencial Satelital de Delitos Ambientales (UMGSDA) realizaron las primeras diligencias en la zona.
Sobrevuelo con dron
Explicaron que las labores obedecen a la necesidad de verificar el impacto de la afluencia de crudo de petróleo en el ecosistema, en el marco de la declaratoria de emergencia sanitaria decretada por el Ministerio de Salud. “(El derrame) Abarca el río Saramiriza, afluente del río Marañón y las comunidades aledañas”, precisó la institución.
El incidente se produjo el pasado 18 de julio y desató la tensión entre ambas partes. Por un lado, la empresa Petroperú denunció que fue causado por “un acto delincuencial”, mientras que la comunidad responsabilizó a la entidad y prohibió el ingreso del personal, así como representantes del Gobierno Central.
Solo en los últimos días, la petrolera volvió a invocar a la población de la comunidad de Nuevo Progreso que les permita ingresar a la zona para continuar con los trabajos de remediación. Durante las primeras pesquisas, el Ministerio Público ha podido evaluar la gravedad de la emergencia y el posible impacto negativo en el ecosistema.