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Escolares viajan en bateas para llegar puntual a clases

Diariamente emplean recipientes plásticos para dirigirse a sus escuelas. Menores proceden de familias pobres que no pueden pagar por transporte fluvial.
niños-bateas
27-03-2019

La pobreza en Belén, uno de los cuatros distritos urbanos de Iquitos, y uno de los 11 distritos de la provincia de Maynas, es alarmante. A tal punto llega esta situación que los escolares que provienen de familias pobres, van al colegio cruzando las calles cubiertas de agua empleando bateas de plásticos.

Belén considerada “La Venecia peruana”, vive en la pobreza, en especial la zona denominada Bajo Belén, donde la pobreza extrema es lo más evidente. Muchos hogares no cuentan con conexión eléctrica y menos de agua potable. Es en esas condiciones que los menores que acuden al colegio, emplean su “propia movilidad”, como se observa en un video propalado ayer por dos televisoras.

Estos niños y niñas que en esta época escolar deben trasladarse a sus centros educativos situados en la cuenca del río Itaya, en bateas de plásticos que se adecúan a sus pequeños cuerpos.

¿Por qué no viajan en balsa como se trasladan la mayor parte de pobladores? Porque la falta de recursos le impiden pagar por un viaje en estos medios de transportes. Esos recipientes de plásticos los acompañarán todo el año escolar como su único medio de movilidad y por eso lo cuidan, al igual su uniforme, calzado y cuadernos que llevan a la escuela.

Las imágenes transmitidas en un video en dos televisoras, se aprecia a los menores que colocan las bateas en el río para luego subirse en ellas. Los escolares se valen de sus pequeños brazos para emplearlos como remos. Incluso en su recorrido, se agarran de las estructuras de madera de las casas para no perder el equilibrio.

Los estudiantes deben salir temprano para acudir a la escuela, porque además de la demora del traslado, deben darse tiempo para que una vez en su destino, retirar los zapatos y sus calcetines para secarse los pies.

Los pobladores dan cuenta que alguna vez se han producido accidentes donde los menores han caído al agua con sus libros. En ese caso, regresan a su hogar para secarse y tratar ventilar sus útiles.

“La falta de recursos económicos de los padres de familia nos les permite pagar un medio de transporte más seguro para dirigirse a sus centros educativos ubicados en la cuenca del río Itaya”, refiere un poblador. Lo grave que esta situación se repite cada año.

Construyan puentes

La presencia de menores que acuden a sus colegios en bateas de plásticos, se repite cada año y por ello un grupo de dirigentes pidió que el gobierno central construya puentes que hagan más accesible trasladarse a los escolares. “Alguna vez vino un ministro ofreciendo que se construirían puentes, pero solo fueron promesas. Hay mucho que hacer en Belén, pero ni siquiera se ven obras como estas que están pendientes”, refirió uno de los pobladores que pidió un mejor acceso a los centros educativos.

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