20/10/2022 / Exitosa Noticias / Edic. impresa / Actualizado al 09/01/2023
La estimulación temprana es un conjunto de acciones que se brinda al niño en los primeros años de vida con el objetivo de favorecer el desarrollo de sus facultades físicas, cognitivas, emocionales y sociales, ayudando así a potenciar y desarrollar las funciones cerebrales.
Además de ello, la Lic. Mariana Guevara destaca que con la estimulación temprana “también se logra evaluar a corta edad algún tipo de déficit, ya sea intelectual o motor, permitiendo su posible corrección o compensación para que no se vea truncado su desarrollo personal”.
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La especialista da a conocer estos 4 beneficios que brinda la estimulación temprana:
Desarrollo emocional. El bebé empezará a distinguir, expresar y canalizar los sentimientos y sus reacciones frente a la alegría, tristeza, enojo o frustración.
Lenguaje y comunicación. La estimulación temprana hace que el infante, a corta edad, pueda juntar palabras, comprender, memorizar y expresar sus pensamientos con facilidad.
Desarrollo psicomotor. Con actividades lúdicas se logra que el niño fortalezca sus huesos y músculos, permitiendo que en los primeros meses de vida puedan sostener la cabeza, o que en menos de un año pueda empezar a asumir una postura correcta.
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Estímulo y desarrollo del cerebro. La estimulación temprana aplica procesos educativos que promueven el desarrollo neurológico del niño/a. También permite que mejoren su capacidad de resiliencia, asertividad y pensamiento creativo, muy útiles para tomar decisiones y llevar a cabo todo lo que se propongan en la vida.
Finalmente, la Lic. Guevara indica que es importante llevar un control de salud para evaluar el crecimiento y desarrollo de nuestros pequeños.
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